El Retorno de Jesús

La esperanza por el retorno de Jesús ha sido un tema de interés desde los primeros días de la Primera Iglesia hasta nuestros tiempos. No es de sorprenderse, pues, que este tema esté en la mente de la gente en este nuevo milenio. Seis meses antes de la llegada del año dos mil, un escritor de la Prensa Asociada (Associated Press) escribió un artículo titulado: “¿El Nuevo Milenio Nos Traerá de Regreso a Jesús?”. Este fue un especial sindicado que estuvo disponible para su publicación en muchos periódicos en todo Estados Unidos. El artículo cita comentarios y predicciones de varios individuos y organizaciones sobre este tema.

EN LA ESPERA

Las estadísticas que fueron citadas en el artículo son las siguientes: “De acuerdo con una encuesta realizada por al Prensa Asociada, uno de cada cuatro adultos cristianos (estimativamente 26.5 millones de personas) esperan que Jesús regrese en el correr de su vida. Tantos o más están convencidos de ello (aproximadamente 21.1 millones de estadounidenses) que sienten la urgencia de convertir a amigos y vecinos”.

El autor del artículo notó que la esperanza de que Jesús regrese “ha apuntalado a la cristiandad desde sus comienzos”. Por ello él preguntó: “¿Qué es lo que hace que las plegarias de hoy en día sean tan serias y fervorosas? ¿Qué es lo que separa esta generación del fin del tiempo de las generaciones de los últimos dos milenios?”. Él también escribió acerca de la señal dada a Israel diciendo:

LA HIGUERA

“El Nuevo Testamento compara el Reino de Dios, que está cerca, con el crecimiento de una higuera. Algunos creyentes sustituyen a Israel por la higuera. Ellos dicen que el segundo advenimiento estará cerca cuando Israel se convierta en una nación”.

“Y ello sucedió en 1948”. “De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca” Jesús dijo en Lucas 21:32.

“Desde que muchos profetas del final de los tiempos ubican el apocalíptico Armagedón en Israel, los aconteciminetos de esa zona continúan por acaparar el interés. En 1967, cuando Israel conquistó la gran parte de Jesrusalén, la profecía de Lucas sólo se fortaleció”.

“Durante la guerra entre Estados Unidos e Irak en 1991, muchos evangelistas desde Billy Graham a John Walvoord (Consejero del Seminario Tecnológico de Dallas) imaginaron el principio del fin”.

“ Y cuando en 1993 se firmó el tratado de paz del Oriente Medio, la radio evangelista Monte Judah de Norman de Oklahoma, identificó el comienzo de los siete años de tribulaciones que llevarían al segundo advenimiento”.

“Para los evangélicos , las señales del fin pueden ser encontradas en todos lados y en cualquier momento”. Los desastres mundiales como las inundaciones, guerras y terremotos son las señales que Jesús, en Mateo, les dijo a los seguidores que tenían que buscar. El cometa Hale-Boop, la inhanición en África, el desarrollo de eventos en el Mercado Común Europeo, aún la convergencia de lunas llenas y las festividades religiosas Judías, son citados como señales del apocalípsis”.

LOS EVENTOS PRECEDENTES

La imagen de la higuera en conección con Israel fue cumplida cuando los judíos retornaron a Palestina de todas partes del mundo. Esta es una señal más dada a los discípulos por Jesús, cuando ellos le preguntaron sobre las señales que precederían su retorno. La descripción bíblica de este hecho puede encontrarse en Mateo 24:32-34, aunque también es mencionado en Marcos 13:28-30 y Lucas 21:29-32. El autor de este artículo no menciona ni discute un número importante de temas. Uno de ellos es el significado de la palabra griega “parousia” que ha sido traducida por los traductores de la versión del Rey James y muchos otros traductores como “advenimiento”. Parousia significa “presencia” y los discípulos de Jesús estaban interesados en su presencia no en su advenimiento.

En este artículo también se mencionó que desastres mundiales como inundaciones, guerras y terremotos eran señales mencionadas por Jesús y que eran tomadas como claves del fin. Sin embargo Jesús les dijo a sus discípulos que tales desastres ocurrirían como la normal expectativa de la humanidad. Él dijo: “pero aún no es el finMateo 24:6 y “Y todo esto será principio de doloresvs.8. Las señales significantes de su presencia comienzan con Mateo 24:14.

LAS APARICIONES DE JESÚS

Es evidente en el artículo que la gente entrevistada esperaba que Jesús regresara en carne y hueso como lo hizo en su primer advenimiento. Jesús dijo: “y el mundo no me verá másJuan 14:19. Las Escrituras nos enseñan que cuando Jesús fue resucitado de los muertos, no era más un ser humano sino un poderoso ser Divino, la “imagen del Dios invisibleCol.1:15; II Cor. 5:16; I Pedro 3:18. Esto significa que por naturaleza, Jesús es invisible al ojo humano como Dios lo es. Es este Cristo Divino quien retornará a la tierra imperceptible al ojo humano.

Es verdad que Jesús se les apareció a sus discípulos como un hombre en varias ocasiones después de su resurrección, pero esto no significa que en naturaleza él siguiera siendo humano. Las circunstancias de sus breves apariciones prueban los contrario. Por ejemplo, él siempre aparecía en diferentes cuerpos, lo cual no habría sido posible si el cuerpo en el que aparecía fuera su cuerpo real.

Solamente una vez Jesús apareció en un cuerpo similar al que tenía cuando fue crucificado, y eso fue pues Tomás dejó bien en claro que no creería que el Maestro se había levantado de los muertos si no veía sus heridas. Jesús satisfizo su falta de fe, pero fue ésta la única vez que los discípulos le vieron las heridas. El Apóstol Juan descibe esta aparición como una de las “señales” por medio de las cuales Jesús les probó que se había levantado de los muertos. (Juan 20:29-31) En otras ocasiones cuando Jesús se les apareció a sus discípulos, después de su resurrección, éstos no lo reconocieron por su apariencia sino por las cosas que dijo e hizo.

Las apariciones de Jesús a sus discípulos después de haber resucitado fueron de la misma naturaleza que las apariciones de los ángeles en tiempos ancestrales. Como por ejemplo los ángeles que se le aparecieron a Abraham. Ellos bebieron y comieron con él, pero no eran humanos, aunque por un tiempo Abraham así lo creyó (Génesis 18:1,2 - Hebreos 13:2).

Jesús estuvo en presencia de sus discípulos por cuarenta días después de su resurrección y antes de su asención. Pero los discípulos pudieron verle por menos de ese tiempo y sólo porque él se les apareció milagrosamente. Es este Jesús que puede presentarse invisible ante los humanos, el que retornará a la tierra para establecer su reino de justicia. La raza humana redimida verá sus problemas de egoísmo resueltos y será restaurada a la felicidad y la vida sobre la tierra (Apoc. 21:1-5).

LA CARNE Y LA RECOMPENSA DE JESÚS

Jesús fue hecho carne para dar su humanidad como recompensa por la raza de Adán. El Maestro dijo: “mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo(Juan 6:51). Si Jesús se hubiera levantado de los muertos como un humano, hubiera significado que la recompensa se habría devuelto y con ésto que el mundo de la humanidad no habría sido redimido.

Las Escrituras nos muestran que mientras Jesús fue muerto en la carne, fue vivificado en el Espíritu, o como un ser espiritual. (I Cor. 15:44-47; I Pedro 3:18). Jesús le había explicado a Nicodemo que el que nace en el Espíritu puede ir y venir como el viento, esto es, invisible al ojo humano y con un gran poder. Él probó ésto con su propia persona, pues los discípulos no sabían ni como venía ni como se iba. (Juan 3:8).

No discutimos que Jesús tiene el poder de aparecerse a humanos como lo hizo a sus discípulos después de su resurrección. Sin embargo las Escrituras no dicen que su retorno al mundo será de esta manera. Las apariciones de Jesús a sus discípulos tuvieron como cometido el grabar en sus mentes el hecho de que él se había levantado de los muertos. Este hecho ya fue establecido, por lo tanto no tenemos por qué esperar que se repita.

Concerniente a Dios leemos: “Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa” (Rom. 1:20). Aquí está la clave que nos ayudará a entender las profecías relacionadas con el retorno de Cristo. Él es invisible a los ojos humanos, como el Padre Celestial lo es. En su retorno podrá ser reconocido sólo por las cosas visibles, que serán identificadas a través de las profecías de la Biblia como las señales que marcan su segundo advenimiento a la tierra.

Veamos las cosas de otro modo. Nosotros creemos en la existencia de Dios, no porque lo hayamos visto sino porque hemos visto su obra. Con nuestras limitadas habilidades escudriñamos el vasto universo y decimos que debe haber un poderoso, omnisapiente Creador detrás de ésto. El caso es similar en la Palabra Sagrada donde podemos encontrar una gran cantidad de eventos que tendrán lugar antes del retorno del Divino Cristo. Si podemos ver que algunos de estos hechos ya están sucediendo, llegamos a la lógica conclusión que el segundo advenimiento de Cristo es una realidad.

SEÑALES DE SU PRESENCIA

Los hechos y eventos que suceden después del retorno de nuestro Señor se llaman señales. ¿Cuáles son algunas de estas señales? La primera señal que está registrada la encontramos en Mateo 24:14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”. Este “fin” del que se habla es el fin del mundo maligno de hoy. El Evangelio es las buenas noticias contenidas en la Biblia que hablan del maravilloso reino de Dios que está por venir. Han habido muchos misioneros que han intentado convertir a personas que no entendían este mesaje glorioso, pero esta escritura no se satisface por sus esfuerzos. La intención de Dios es que se dará un sólo testigo por nación, pero no intentará convertir al mundo entero en ese momento. (Vean Mateo 13:10-17) El tiempo en el que toda la humanidad “venga al conocimiento de la verdad” será en el reino de Dios (I Tim. 2:4). Esta señal consiste en el trabajo de las Sociedades Bíblicas que se han encargado de poner a disposición de todos la Biblia en todos los idiomas conocidos en el mundo. Existen más de 1800 idiomas en el mundo, a los cuales la Biblia ha sido traducida, se estima que hablamos de tres a cuatro mil comunidades.

TIEMPO DE TRIBULACIONES

Otra señal se da en Mateo 24:21porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá”. Estas tribulaciones han ocurrido en faces y han afectado al mundo entero. La Primera Guerra Mundial fue una face, la Gran Depresión fue otra, la Segunda Guerra Mundial, otra más y las continuas guerras que se pelearon y se siguen peleando por los límites geográficos de las naciones. Todas las naciones se verán afectadas del punto de vista social, político, financiero y de las instituciones religiosas. Como parte de estas tribulaciones debemos seguir esperando la anarquía, la destrucción, la lucha, el odio y la maldad.

Las palabras de Jesús en Mateo 24:22 son las que se revelan y entienden como una señal de los últimos cincuenta años, ellas dicen: “Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados”. Antes de 1945, nosotros podíamos especular con lo que podría destruir completamente la vida en la tierra. La fuerza mortal y devastadora de las bombas atómicas que explotaron sobre Hiroshima y Nagasaki en Japón en agosto de 1945 nos mostró la terrible intensidad de las armas nucleares. Muchas naciones corrieron a desarrollar estas armas y ahora existen tantas como para destruir toda vida en el planeta muchas veces. Desde 1945 las armas atómicas se han ido acumulando y es desde esa misma fecha que la destrucción de la vida sobre la tierra, de acuerdo a lo dicho por Albert Einstein, se ha convertido en una posibilidad técnica.

ISRAEL VUELVE A JUNTARSE

Otra señal mencionada en Mateo 24:32-34 es la restoración a Israel de su tierra. Lo que ha ocurrido en este tema desde 1878 es milagroso y por ello estarán preparados para la bendición del reino Mesiánico. Israel volverá a juntarse en el momento en que las naciones se junten para la última batalla destructiva en Armagedón. Joel 3:1,2 lee: “Porque he aquí que en aquellos días, y en aquel tiempo en que haré volver la cautividad de Judá y de Jerusalén, reuniré a todas las naciones, y las haré descender al valle de Josafat, y allí entraré en juicio con ellas a causa de mi pueblo, y de Israel mi heredad, a quien ellas esparcieron entre las naciones, y repartieron mi tierra”.

Esta profecía indica que mientras el pueblo judío se junte en su tierra, será un momento de tribulaciones tanto para ellos como para las naciones en general. Otras profecías indican que habrán tribulaciones adicionales para ellos, lo que a la luz de las circunstancias vistas en los últimos años no se nos hace difícil de creer. No es sabio entrar en detalles de eventos que aún están por suceder, pero las Escrituras nos hablan que cuando las naciones estén casi al final de sus mortales batallas y la amenaza de la destrucción total a través del uso inadecuado de las armas nucleares esté sobre la humanidad, los israelitas serán atacados en la Tierra Prometida. Ahí el Señor intervendrá por ellos, rescatándolos de sus enemigos, y a través de sus profetas resucitados establecerá su reinado como el poder gobernante sobre toda la tierra.

Ezequiel 38:14-23 muestra algunos detalles de esta tribulación final. La epistemología de los nombres que se le dan a los enemigos de Israel en esta profecía parecen indicar que identifican ejércitos de Europa y del Medio Oriente. La profecía muestra que estas fuerzas eventualmente atacarán al pueblo judío. De acuerdo con esta profecía hallada en Joel 3:1,2, Ezequiel explica que estas hordas (como una nube) son las fuerzas del anti-Dios que amenazarán el retorno de los israelitas. Eze. 38:16.

Será un tiempo de temblores, explica el profeta en los salmos 110-5 (también en Isa.2:17-19). La promesa es que el Señor escortará a su pueblo antiguo y a través de esto los “ojos” de las naciones discernirán la presencia y poder del nuevo Rey de la tierra. Él como agente y mano derecha de Jehová dirigirá este tema. Por ello todo los ojos discernirán la presencia de Jesús en la nube de tribulaciones (Apoc. 1:7) y se convencerán de su majestuosidad y gloria a través del nuevo reino y los arreglos que luego pondrá en práctica.

Esta misma sucesión de acontecimientos es la que les abrirá los ojos a los israelitas. Leemos: “Y haré notorio mi santo nombre en medio de mi pueblo Israel, y nunca más dejaré profanar mi santo nombre; y sabrán las naciones que yo soy Jehová, el Santo en IsraelEze. 39:7. ¡ Qué cambio traerá a las miradas de Israel! La defensa de Israel por el Divino poder, será la primera manifestación de la operación de los nuevos poderes del mundo. Desde ese momento los agentes del reino calmarán la tormenta de las pasiones humanas, que para ese entonces habrán llevado a la gente a un estado de desesperación total.

La humanidad estará muy feliz al saber que la espada que colgaba sobre la cabeza de la gente como un implemento de ejecución, ha sido removida para siempre. Con el establecimiento del reino de Dios , llegará el cumplimiento de Isaías capítulos 11 y 35, y de muchas otras maravillosas profecías relacionadas con el reino. Las personas entrevistadas para el artículo que aparece como introducción en esta lección se sentirán regocijados al saber que los no creyentes y sus familias no serán atormentados para siempre, o destruídos, sino que llegarán al conocimiento de Dios y su verdad. Isa. 11:9. “...el celo de Jehová de los ejércitos hará estoIsa. 37:32.


Vivir es Cristo

Verso clave:Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es gananciaFilipenses 1:21.

Escritura seleccionada: Filipenses 1:12-30

En su epístola a los Filipenses, el Apóstol Pablo expresa su unión de amor para con sus hermanos. Este sentimiento era mutuo pues ellos querían mucho al apóstol y apreciaban el servicio de éste para con ellos.

Él les agradece sus regalos y la atención especial que tuvieron para con él mientras estaba prisionero en Roma. También aprovechó la oportunidad para compartir con ellos sus experiencias y para hacerles saber de su condición física, de su continua fe y del progreso del trabajo del Señor.

Él dijo: “Y quiero, hermanos, que sepáis que las cosas que me han sucedido, han redundado más en provecho del evangelio; De manera que mis prisiones han sido célebres en Cristo en todo el pretorio, y á todos los demás(Fil. 1:12,13). Él acepta que sus experiencias fueron dirigidas directamente por la divina mano de Dios, y que esa verdad será transmitida honrando el nombre de Dios a toda costa. Él no estaba preocupado con su propia comodidad siempre y cuando pudiera ser de servicio al pueblo del Señor, como también de testigo para los demás.

En el Verso clave el apóstol expresa su profundo deseo de continuar su vida al servicio del Señor. También les asegura a sus hermanos filipenses que tiene completa fe en las promesas de Dios y que si la voluntad de Dios es que él muera en la prisión, no importaría, pues él sabe que recibirá un premio abundante en el futuro reino de Cristo.

El apóstol comparte sus más sagrados sentimientos con sus amados hermanos diciéndoles que sería difícil para él escoger entre la vida y la muerte. Pues si bien la vida está llena de sufrimiento y trabajo duro, y la muerte traería un final a esas pruebas, él no tenía una elección personal y dejó ese tema en manos de Dios. Pablo continúa: “Mas si el vivir en la carne, esto me será para fruto de la obra, no sé entonces qué escoger;Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de ser desatado, y estar con Cristo, lo cual es mucho mejor” (Fil. 1:22,23 Nueva Versión Americana Estandarizada).

El apóstol estaba dispuesto a permanecer en el estado de incertidumbre que se encontraba siempre que fuera la voluntad de Dios. Él consideraba su vida presente como de poco valor otro que el de servir al Señor y a su pueblo. El deseo de Pablo de sacrificar su vida por los hijos de Dios se nos presenta claramente cuando dice: “Empero quedar en la carne es más necesario por causa de vosotros. Y confiado en esto, sé que quedaré, que aun permaneceré con todos vosotros, para provecho vuestro y gozo de la fe; Para que crezca vuestra gloria de mí en Cristo Jesús por mi venida otra vez á vosotros” (vs. 24,25 Nueva Versión Internacional).

Hay una importante lección en las palabras del apóstol para todo aquel cristiano creyente. Nadie sabe cuanto más tiempo uno continuará en la vida presente. Sólo aquellas cosas que son hechas con la confianza puesta en Dios son las que duran eternamente. Sirvamos al pueblo del Señor en cada oportunidad que se nos presente y dejemos los resultados en manos del divino Dios. Como el apóstol dijo: “...ó sea que vaya á veros, ó que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes combatiendo juntamente por la fe del evangeliovs. 27 NVI y por lo tanto cumplir el mismo deseo expresado por Pablo: “Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.” vs. 21.


Humildad Genuina

Verso clave:Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús Filipenses 2:5

Escrituras seleccionadas: Filipenses 2:1-18

El Apóstol Pablo amaba mucho a sus hermanos filipenses y los animaba para que se llenaran del espíritu de la cristiandad. Él les dijo: “Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo; si algún refrigerio de amor; si alguna comunión del Espíritu; si algunas entrañas y misericordias, Cumplid mi gozo; que sintáis lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. Nada hagáis por contienda ó por vanagloria; antes bien en humildad, estimándoos inferiores los unos á los otros: No mirando cada uno á lo suyo propio, sino cada cual también á lo de los otros. Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo JesúsFil. 2:1-5 Nueva Versión Americana Estandarizada.

Uno de los deseos más importantes que un consagrado hijo de Dios debe tener es el de ser más fiel y servicial hacia el Padre Celestial. Aquellos cristianos que son humildes, como Pablo explica, están mejor preparados para aprender las valorables experiencias que entran a sus vidas consagradas.

Ellos aprenden a esperar pacientemente por el Señor y a rezar para que se cumpla su voluntad. Dios no puede resaltar a nadie que no sea humilde de mente y espíritu. El más sumiso es el que recibirá la mayor de las bendiciones.

El regocijo del apóstol sería cumplido en proporción a su poder de reconocer en sus hermanos la apropiada cualidad de cristianos y amor por el Señor. El ser cristiano implica el espíritu de amor y unidad de los corazones, entre los varios miembros del cuerpo de Cristo, que están juntos por el propósito final. Nuestro Señor Jesús en su existencia previa como parte del Logos, era un obediente y humilde hijo de Dios. Él no intentó resaltarse a si mismo , o buscar un nombre más alto que el de él, como hizo Satán. Él no tenía intención alguna de ponerse en el mismo nivel que su Padre Celestial. El apóstol expresa este pensamiento del Logos y dice: “El cual, siendo en forma de Dios, no tuvo por usurpación ser igual á Dios: Sin embargo, se anonadó á sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante á los hombres; Y hallado en la condición como hombre, se humilló á sí mismo, hecho obediente hasta la muerte, y muerte de cruzFil. 2:6-8 Diálogo Enfático de Wilson.

Cuando su Padre Celestial le pidió que dejara su hogar celestial, se hiciera más humilde y se convirtiera en hombre en un plano muy inferior de la existencia, el Logos aceptó la tarea que le esperaba. El salmista nos proporciona un registro de la humilde predisposición de Jesús. Él escribe: “Entonces dije: He aquí, vengo; En el envoltorio del libro está escrito de mí: El hacer tu voluntad, Dios mío, hame agradadoSalmos 40:7,8.

El Maestro estaba listo para dar su vida en sacrificio por toda la familia humana. Durante su ministerio de los primeros días como un hombre perfecto, nuestro Señor Jesucristo siempre manifestó el espíritu de reverencia y amor por Dios. La lección para todos los hijos de Dios en estos años finales de la Época del Evangelio es “Humillaos pues bajo la poderosa mano de Dios, para que él os ensalce cuando fuere tiempoI Pedro 5:6.

Nuestro Señor nos ha mostrado el camino que nos guía hacia la fe y la fidelidad. Así como él fue humilde al seguir la voluntad de Dios, así es como todos los que han decidido caminar con él deben poner todo de sí para alcanzar una humildad genuina.


Esforzándonos para Parecernos a Cristo

Verso clave:Prosigo al blanco, al premio de la soberana vocación de Dios en Cristo Jesús.” Filipenses 3:14

Escritura seleccionada: Filipenses 3:1-21

Luchando para parecernos a Cristo es una cualidad que el pueblo de Dios quiere alcanzar. Todo hijo de Dios debe luchar para poder ser como nuestro Señor Jesús en todas las cosas de la vida, ya sea por la acción, la palabra, o la actitud. Esto significa que hay que tener la necesidad de resistir el espíritu del egoísmo y el de la deshonestidad, y de focalizar nuestra atención en obtener mayor gracia en nuestras vidas cotidianas como cristianos. Había una unión de amor muy especial entre el Apóstol Pablo y sus hermanos filipenses, por lo que el apóstol compartió sus sentimientos e intenciones en esta epístola. Él apreció profundamente la invitación para dejar de lado sus propias ambiciones en la vida y para seguir a nuestro bendito Señor al esforzarse sobremanera para alcanzar el máximo premio que el mundo haya visto. Él nos llama la atención a ésto en otras epístolas donde dice: “A los que perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad, la vida eternaRom. 2:7.

Él le habla a la iglesia de los filipenses sobre el Alto Llamado que nos dirije al gran premio de la naturaleza Divina que es ofrecido por Dios en la presente Época del Evangelio. Es para aquellos que se esfuerzan y que aprecian el parecerse a Cristo. El apóstol hace a un lado su propia voluntad y preferencias para obtener la herencia espiritual a la que fue llamado. Todos los intereses terrenales los consideró como sin valor cuando los comparó con la esperanza que tenía por delante.

El llamado celestial, junto con todas sus preciosas promesas, es tan glorioso que todo el resto de las cosas se disuelven en la insignificancia. Él dijo: “Y ciertamente, aun reputo todas las cosas pérdida por el eminente conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y téngolo por estiércol, para ganar á CristoFil. 3:8. Pablo consideraba un privilegio vivir y morir para y por el Señor. Él quiso compartir la camaradería y los sufrimientos de Cristo y el estar conforme ante su proipa muerte, “Si en alguna manera llegase á la resurrección de los muertosvs. 11. El apóstol continúa: “Hermanos, yo mismo no hago cuenta de haber lo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome á lo que está delante, Prosigo al blanco, al premio de la soberana vocación de Dios en Cristo Jesúsvs. 13,14. El continuar en total seguridad de la fe trae aparejado esfuerzo y diligencia de parte del pueblo de Dios, pero podemos confiar que nuestro Señor va a estar con su gente todo el recorrido.

Aquellos que son fieles creen fuertemente en las promesas con total seguridad en su fe. “Mas nuestra vivienda es en los cielos; de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; El cual transformará el cuerpo de nuestra bajeza, para ser semejante al cuerpo de su gloria, por la operación con la cual puede también sujetar á sí todas las cosasvs. 20,21.

Dejemos que cada hijo de Dios continúe esforzándose de manera diligente para parecerse a Cristo, para ganar el precio del Alto Llamado.


Profunda Alegría

Verso clave:Gozaos en el Señor siempre: otra vez digo: Que os gocéisFilipenses 4:4

Escritura seleccionada: Filipenses 4:4-20

Los cristianos tienen muchas cosas para estar contentos y el Apóstol Pablo exhorta a los hijos de Dios a tener siempre una actitud de regocijo. Una de las cosas por las cuales tenemos que estar más agadecidos es por el regalo de Dios, su hijo nuestro Señor Jesús, como sacrificada recompensa en nuestro nombre y en en el de toda la humanidad. Hay muchas personas que no han oído hablar de este maravilloso regalo. Pero Dios proclamará a su hijo al mundo durante su futuro reino cuando todos recibamos los beneficios de la restitución de todo lo que perdimos por causa del pecado.

Toda la humanidad fue condenada a la muerte por causa del pecado, pero la voluntad de Jesús de dejar su hogar celestial, venir a la tierra como un hombre perfecto para sufrir y morir por toda la humanidad, nos da la oportunidad de vivir en su reino futuro. Pablo dice: “Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios...” Fil. 4:6 Diálogo Enfático de Wilson.

Una de las bendiciones especiales del cristiano creyente es la oración. Dios oye las plegarias de su gente y siempre está alerta para dirigir sus vidas de acuerdo a su divina voluntad. El apóstol escribe sobre la paz de Dios y como supera todo entendimiento. Aquellos que han experimentado esta paz y su obra en sus vidas consagradas, experimentarán mucha más alegría.

Continuando, el apóstol exhorta a los hijos de Dios a pensar sobre las cosas sagradas que levantan el espíritu y dan alegría. Él dice: “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto pensadFil.4:8. Él le dice a sus hermanos filipenses que si ellos aprendieron algo de cuando él les sirvió, entonces, ellos experimentarán la paz de Dios.

El apóstol comparte muchos lazos afectuosos con los hermanos filipenses. Él estaba agradecido por el cuidado que le proporcionaron en sus momentos más duros y estresantes. Pero sin importar en cual posición se encontrase, Pablo estaba siempre contento de seguir la guía de Dios. Él dice: “Sé estar humillado, y sé tener abundancia: en todo y por todo estoy enseñado, así para hartura como para hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidadvs. 12.

El servicio que Pablo les brindó a sus hermanos filipenses fue maravilloso y las exhortaciones en sus epístolas fueron de mucha ayuda para los que él amó. Su reconocimiento se dio a saber en su intento de aliviar el sufrimiento de Pablo como prisionero de Roma y en otros momentos de necesidad. Como Pablo dice: “Sin embargo, bien hicisteis que comunicasteis juntamente á mi tribulación. Y sabéis también vosotros, oh Filipenses, que al principio del evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia me comunicó en razón de dar y recibir, sino vosotros solosFil. 4:14,15 Nueva Versión Internacional.

Durante la cosecha de la presente Época del Evangelio, la gente del Señor debe continuar teniendo fe, confiando en las promesas de la palabra de Dios. Debemos sentir lo que dice Pablo: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalecevs. 13. Aquellos que tengan esta actitud de corazón, serán los que tendrán más regocijo en el Señor.


Vida y Doctrina Cristiana
El Plan de Dios en el libro del Génesis - Parte 36

El Entierro de Jacob y la Muerte de Juan

Capítulo cincuenta

Versos 1-14

“Entonces se echó José sobre el rostro de su padre, y lloró sobre él, y besólo”.

“Y mandó José á sus médicos familiares que embalsamasen á su padre: y los médicos embalsamaron á Israel”.

“Y cumpliéronle cuarenta días, porque así cumplían los días de los embalsamados, y lloráronlo los Egipcios setenta días”.

“Y pasados los días de su luto, habló José á los de la casa de Faraón, diciendo: Si he hallado ahora gracia en vuestros ojos, os ruego que habléis en oídos de Faraón, diciendo:”

“Mi padre me conjuró diciendo: He aquí yo muero; en mi sepulcro que yo cavé para mí en la tierra de Canaán, allí me sepultarás; ruego pues que vaya yo ahora, y sepultaré á mi padre, y volveré”.

“Y Faraón dijo: Ve, y sepulta á tu padre, como él te conjuró”.

“Entonces José subió á sepultar á su padre; y subieron con él todos los siervos de Faraón, los ancianos de su casa, y todos los ancianos de la tierra de Egipto”.

“Y toda la casa de José, y sus hermanos, y la casa de su padre: solamente dejaron en la tierra de Gosén sus niños, y sus ovejas y sus vacas”.

“Y subieron también con él carros y gente de á caballo, é hízose un escuadrón muy grand”.

“ Y llegaron hasta la era de Atad, que está á la otra parte del Jordán, y endecharon allí con grande y muy grave lamentación: y José hizo á su padre duelo por siete días”.

“Y viendo los moradores de la tierra, los Cananeos, el llanto en la era de Atad, dijeron: Llanto grande es este de los Egipcios: por eso fué llamado su nombre Abelmizraim, que está á la otra parte del Jordán”.

“Hicieron, pues, sus hijos con él, según les había mandado:”

“Pues lleváronlo sus hijos á la tierra de Canaán, y le sepultaron en la cueva del campo de Macpela, la que había comprado Abraham con el mismo campo, para heredad de sepultura, de Ephrón el Hetheo, delante de Mamre”.

“Y tornóse José á Egipto, él y sus hermanos, y todos los que subieron con él á sepultar á su padre, después que le hubo sepultado”.

El registro del entierro de Jacob dice: “solamente dejaron en la tierra de Gosén sus niños, y sus ovejas y sus vacas” cuando volvieron a Canaán a enterrar a Jacob. Esto incluye, en adición a los hijos de Jacob y sus hijos mayores, a los “sirvientes del Faraón” Este fue un maravilloso tributo de respeto y amor por Jacob y revela la alta estima que le tenía su familia. Además muestra que ellos compartían la fe de su padre en las promesas de Dios relacionadas con Canaán.

Versos 15-21

“Y viendo los hermanos de José que su padre era muerto, dijeron: Quizá nos aborrecerá José, y nos dará el pago de todo el mal que le hicimos”.

“Y enviaron á decir á José: Tu padre mandó antes de su muerte, diciendo:”

“Así diréis á José: Ruégote que perdones ahora la maldad de tus hermanos y su pecado, porque mal te trataron: por tanto ahora te rogamos que perdones la maldad de los siervos del Dios de tu padre. Y José lloró mientras hablaban”.

“Y vinieron también sus hermanos, y postráronse delante de él, y dijeron: Henos aquí por tus siervos”.

“Y respondióles José: No temáis: ¨¿estoy yo en lugar de Dios?”

“Vosotros pensasteis mal sobre mí, mas Dios lo encaminó á bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida á mucho pueblo”.

“Ahora, pues, no tengáis miedo; yo os sustentaré á vosotros y á vuestros hijos. Así los consoló, y les habló al corazón”.

Hasta la muerte de Jacob , los hermanos de José habían tomado por seguro que éste no les haría pagar con un castigo especial el hecho de que hubiesen querido deshacerse de él mucho tiempo atrás. Pero ahora empezaron a sentirse inseguros y con miedo pues su bondad hacia ellos había sido por el amor que le tenía a su padre. Fue entonces que por primera vez ellos le pidieron perdón humildemente, explicándole que éste había sido el deseo de su moribundo padre.

José siempre estuvo por encima de sus hermanos en el tema de la honestidad y justicia, y les aseguró que no había causa alguna por que temer. “¿Estoy yo en el lugar de Dios?” preguntó y entonces les explicó que mientras ellos estaban intentando hacerle daño, “Dios lo encaminó á bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo”. Como la voluntad de Dios se había manifestado en lo que había pasado, ¿por qué él tendría que decir algo en contra de ellos? Por ello José los confortó “y les habló al corazón”.

Versos 22-26

“Y estuvo José en Egipto, él y la casa de su padre: y vivió José ciento diez años”.

“Y vió José los hijos de Ephraim hasta la tercera generación: también los hijos de Machîr, hijo de Manasés, fueron criados sobre las rodillas de José”.

“Y José dijo a sus hermanos: Yo me muero; mas Dios ciertamente os visitará, y os hará subir de acuesta tierra a la tierra que juró a Abraham, a Isaac, y a Jacob”.

“Y conjuró José a los hijos de Israel, diciendo: Dios ciertamente os visitará, y haréis llevar de aquí mis huesos”.

“Y murió José de edad de ciento diez años; y embalsamáronlo, y fué puesto en un ataúd en Egipto”.

Lo que dice nuestro registro es que “Y murió José de edad de ciento diez años”. El “soñador” como lo llamaban sus hermanos, vivió para ver sus sueños proféticos hacerse realidad. Sus hermanos se habían arrodillado ante él e inclusive su padre dependió de su misericordia. Él no abusó de la autoridad y poder que la divina providencia le dio, sino que se regocijó en el honor y en lo que ésto significó para él, ésto es, el salvar a mucha gente y el preservar la “semilla” de la promesa.

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