Elige la Vida y Vive

Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, la muerte y el mal..” Deuteronomio 30:15.

“A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia” Deuteronomio 30:19

Entre las últimas palabras que Moisés le dijo a la nación de Israel, están aquellas incluídas en nuestro verso clave. Él fue el mensajero de Dios y reiteró las palabras de la Ley de la Alianza ofrecida a esta nación. Se les había dado una ley perfecta pero no pudieron mantenerla. Si así lo hubieran hecho, hubieran recibido vida. El único que fue capaz de mantener esa ley fue Jesucristo, y él dió su vida como recompensa para que Israel pudiera ser rescatada de la sentencia de muerte y también de la condena de la ley. Moisés sabía que Israel iba a necesitar ayuda para mantener la ley y predijo el advenimiento de Jesús diciendo: “Profeta de en medio de ti, de tus hermanos, como yo, te levantará Jehová tu Dios; a él oiréis;” Deut. 18:15

LA PROMESA DEL REINO

Eventualmente la humanidad se beneficiará de dicha recompensa y le será ofrecida la vida. Las Escrituras prometen: “...así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados” I Cor 15:22. La única manera de vida será a través de Jesucristo. Dios dejará que todos los hombres lleguen al conocimiento de la Verdad. Será a través de la obediencia a este conocimiento que el hombre podrá mantener los términos de la Nueva Alianza y así conseguirá la vida. (I Tim. 2:4) Para continuar esta vida, el logro del conocimiento secular requerirá obediencia a los mandamientos de Dios.

AUMENTO DEL CONOCIMIENTO

El siglo veinte presenció el cumplimiento de la maravillosa promesa de Dios de que el conocimiento iría a aumentar en el tiempo del fin. (Dan. 12:4) En la historia del hombre nunca hemos sido testigos de tanto conocimiento como el que podemos ver en este tiempo. Mucho ha sido aplicado aunque hallamos visto sólo los comienzos. Ahora que hemos entrado al siglo v eintiuno, podemos esperar un aumento aún mayor del conociemiento y sus aplicaciones. La humanidad en su egocentrismo, cree que es todo obra suya, y cree que la ciencia lo sabe todo y logrará todo lo bueno. En este hilo de pensamiento, un científico que está en el centro de dichas aplicaciones, redactó una advertencia solemne en un artículo que escribió para Wired.com. Fue publicado por el “Washington Post” a principios de julio del 2000 bajo el tíulo “Technology Check”. El autor, cofundador y jefe científico de Sun Microsystems dijo:

“En vistas de la gran aceleración del progreso tecnológico, con todos los beneficios que ésto conlleva, es tiempo de parar y preguntarnos a dónde nos está llevando este inmenso avance de la ciencia. Con toda una carrera en resolver problemas con la tecnología, le he dedicado poca atención a las últimas consecuencias del poder que estamos empezando a desencadenar”.

"De hecho, todas las advertencias que hemos escuchado han venido de la ciencia ficción o de los ludistas quienes agregan al debate poco más que la rabia ante lo tecnológico. Pero ésto no es excusa para ignorar dichas preguntas. Cada vez más siento recelo por el camino en el que estamos". “Así de terrible como han sido las amenazas nuclear, de armas químicas o biológicas (armas de destrucción masiva) en el siglo veinte, la tecnología detrás de estas amenazas fueron mayoritariamente de carácter y uso militar y fueron hechas por por un número pequeño de naciones. Por más de cincuenta años, hemos tenido suerte de evitar grandes incidentes que envolvieran armas de destrucción masiva.”

“Hoy por hoy estamos frente a un desafío aún mas grande a nuestra supervivencia. Nuestra má poderosa tecnología del siglo veintiuno, como ser la ingeniería genética y la nanotecnología y robótica (GNR), acarrea riesgos ocultos de enormes dimensiones. Esta nueva tecnología posee dos características que la hace diferente a tecnologías anteriores: es auto reproducible y se pueden dar a conocer , esto quiere decir que pueden ser utilizadas por muchos individuos y grupos pequeños que sepan como operarla, algunos de los cuales pueden tener intención de provocar daños catastróficos. Si no tomamos acción, sera plausible encontrarnos viviendo con una nueva categoría de tecnologías con el potencial para la destrucción masiva, todas con posibilidades de ser aplicadas por una ancha variedad de mecanismos comerciales”.

LA AMENAZA DE UNA NUEVA TECNOLOGÍA

El autor está diciendo que a diferencia de las armas nucleares, biológicas y químicas, algunos aspectos de la nueva tecnología podría ser utilizados por cualquier individuo y no por los líderes de los diferentes gobiernos. Aunque la creación de un uso destructivo de la nueva tecnología depende de una mente diabólica, parece que existen potenciales adversas aplicaciones en este nuevo campo de la tecnología. El autor menciona tres de estas aplicaciones:

“El peligro a corto plazo es la liberación de un mortal patógeno: una “plaga blanca” biológicamente creada que pueda ser altamente infecciosa, que tenga un largo período de incubación y que haya sido dirigida a grupos específicos”.

“La nanotecnología posee una amenaza quizás más interesante que los garranchuelos creados con materiales extraños al medio ambiente, que podrían competir con la actual biósfera. En ambos casos, sería imposible pararlas una vez desatadas. Un desastre global podría ocurrir en semanas.”

“La amenaza de la robótica es más lejana, pero como Hans Moravec ha sugerido: “Las especies biológicas raramente sobreviven encuentros de supervivencia con competidores superiores” . Si utilizamos la tecnología para crear inteligencias robóticas superiores a las nuestras, podrían llegar a vernos como desechables”.

LA NECESIDAD DEL DESARROLLO DEL CARÁCTER

Mucho de ésto parece bordear la ciencia ficción, pero para los ojos de este científico estas son amenazas reales para la existencia de la humanidad. Para los estudiantes de la Biblia, la necesidad de dominar estos rasgos en el hombre, por su condición de caído, es una prioridad. Los científicos, por norma, no miran hacia un poder superior para asistirlos en esta materia. Muchos no creen en la existencia de un supremo creador inteligente. Por ello es que buscan soluciones dentro de la sociedad. Para evitar estos desastres potenciales el autor sugirió lo siguiente diciendo:

“Cómo aquellos que se han aferrado a los problemas de armas nucleares, biológicas y químicas, nostros, que estamos envueltos en el avance de nuevas tecnologías, debemos concentrar todos nuestros efuerzos para evitar estos desastres. A continuación les ofrezco una lista de pasos a seguir sugerida por nuestra historia en armas de destrucción masiva:

  1. Que los científicos y tecnólogos (y también los líderes de las grandes corporaciones) den su voto, siguiendo las líneas del Juramento Hipocrático, de evitar todo trabajo en potenciales y actuales armas de destrucción masivas. Hans Bethe, laureado con el premio Nobel, ha sugerido tal paso”.
  2. Creación de un cuerpo internacional que examine públicamente los peligros y la ética de la nueva tecnología. Joshua Lederberg, un científico también laureado con el premio Nobel y que ha trabajado en armas químicas de contención, nos dice que este tipo de trabajo fue parcialmente hecho anteriormente en los Estados Unidos por la Oficina de Evaluación de Tecnología, que desafortunadamente fue abolida en los años noventa”.
  3. Utilizar nociones de responsabilidades más estrictas, forzando a las compañías a asumir responsabilidades por las consecuencias a través de un mecanismo del sector privado que es el seguro. Una compañía podría utilizar la opinión pública publicada de una nueva, quizás internacional y no gubernamental, Oficina de Evaluación de la Tecnología para abogar por tasas de interés más bajas”.
  4. Internacionalizar el control del conocimiento y tecnologías que tienen gran potencial pero que han sido juzgadas como muy peligrosas para ponerla a disponibilidad comercial. Ésto fue propuesto en el reporte de Acheson-Lilienthal para usos militares de la energía atómica, al alba de la era atómica, como una forma de evitar la carrera armamentista de armas atómicas”.
  5. Desistir el seguimiento y desarrollo de tecnologías tan peligrosas para impedir así su disponibilidad. Yo también creo en la búsqueda del conocimiento y desarrollo de nuevas tecnologías, pero ya hemos visto casos, como las armas biológicas, donde el desistir es la opción más sabia”.

“Debemos empezar un esfuerzo colectivo internacional para lograr encontrar salvavidas efectivos y prácticos. Las tecnologías GNR están siendo demandadas comercialmente por causa de la intensa competencia y el acelerado poder de las computadoras. Es claro que si se deja de prestarles atención, pueden provocar el genocidio o resultar en la extinción de las especies. Por fortuna, parece que tenemos tiempo de considerar adecuadamente y de actuar en los temas éticos. Pero ese tiempo es limitado. Creo que sería inmoral hacer nada y atenernos a las consecuencias de lo que está por venir. Podemos hacer algo mejor”.

LA FRAGILIDAD DE LA SABIDURÍA HUMANA

Al mirar estas sugerencias, vemos la fragilidad de lo expuesto, pues no tienen la capacidad de contar con un poder superior que establezca la adopción de tales sugerencias. Concerniente a la sugerencia número 1, el Juramento Hipocrático tomado por los doctores, no previene la mala práctica o el engaño. Sugerencias 2 y 4: las Naciones Unidas han tratado de llevar a cabo lo expuesto y han fallado, reportando que un período de impasse ha sido alcanzado en la creación de una agencia internacional en 1948 después de dos años de fracasados esfuerzos. Es cuestionable cómo se implementarán los ítems 3 y 5 y cómo trabajarán como verdaderos preventivos del desastre.

La única solución a los problemas expuestos por este científico es el establecimiento de la autoridad del Reino de Dios. Se ha profetizado que esta autoridad vendrá de la casa de Isaí Y David. Isaías dice de Jesús que: “Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces.” (Isa.11:1). El Apóstol Pablo esclarece que esta genealogía se refiere a Jesús cuando dio el borrador histórico de Dios favoreciendo a Israel en Anthioch de Pisidia diciendo: “Luego pidieron rey, y Dios les dio a Saúl hijo de Cis, varón de la tribu de Benjamín, por cuarenta años. Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero” Hechos 13:21-23.

LA NECESIDAD DE REFORZAR LA HONESTIDAD

Isaías habla entonces de Jesús, “Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová” (Isa. 11:2). Con el Espíritu del supremo gran Creador del universo dirigiéndolo, ¿cómo podría la tierra tener un mejor “gobernante” para tomar control de los asuntos terrenales?

La profecía continúa: “Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oigan sus oídos; 4 sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; ...” (Isa. 11:3,4). Por primera vez, la verdad prevalecerá. La capacidad de nuestro Señor de leer las intenciones del corazón no confiará en los sentidos auditivo y de la vista. (Mateo 10:26). Los pensamientos maliciosos que intenten hacer daño, serán interceptados antes de que se pongan en acción. Por esta razón, Isaías continúa diciendo “...y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío.” (Isa. 11:4,5).

Tal poderosa autoridad prevaleciente en la tierra, hará de ella un lugar seguro para toda la humanidad. Si los científicos de hoy, que pueden ver el mal manejo de la nueva tecnología como destrucción en la tierra, aceptarán las promesas hechas por Dios a través de sus profetas, ¡Qué aliviados estarían!. Es a través de la autoridad y la verdadera equidad traída por los nuevos “gobernantes” del reino de Dios, que será poderoso y que incluirá a todos, que el profeta dice de ese tiempo: “No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar.” (Isa. 11:9).

EL HOMBRE: UN LIBRE AGENTE MORAL

De esta misma manera, las personas traídas de la tumba en el reino de Dios, tendrán que aprender a amar la honestidad, pues sólo obedeciendo la honestidad de las leyes de Dios serán capaces de vivir sin miedo o peligros en la tierra. Dios les da la opción , obediencia y vida o desobediencia y muerte. Pero para recibir la vida, deberán desarrollar el fruto del Espíritu.

En la Época del Evangelio, Dios ha estado seleccionando “personas para su nombre”. Éstas han sabido que el trabajo de la carne tiene que ser dominado y eliminado. En su lugar, las frutas del Espíritu deberán ser desarrolladas. Una lista de ambas es presentada por el Apóstol Pablo en Gál. 5:19-23. Dice: “Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna” La iglesia en sus experiencias presentes está aprendiendo el significado de los Proverbios 16:18 que dicen: “Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu” Están aprendiendo a dejar atrás la mentira y “...hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo. El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga quécompartir con el que padece necesidad. Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. 30 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.” Efesios 4:25-31.

Éstos requerimientos para la iglesia en la Época del Evangelio, serán los mismos para la Época del Milenio. La diferencia será que bajo las condiciones actuales, la Iglesia debe desarrollar los frutos del Espíritu mientras pelea con un cuerpo imperfecto y los engaños del Adversario. Por lo tanto, en la Época del Milenio, todos tendrán un cuerpo perfecto y el Adversario será eliminado. Será su opción. “Elige la vida” dice nuestro maravilloso Padre Celestial “¡ Y vive!” . Creemos que la gran mayoría de la humanidad lo hará.


Viene del número anterior, páginas 19-32:

Parte III: Culminación

La “Gran Salvación”

Verso 16: “Porque ciertamente no socorrió a los ángeles, sino que socorrió a la descendencia de Abraham

La palabra griega que es traducida como “ciertamente” es utilizada sólo esta vez en el Nuevo Testamento. Es el equivalente a decir “como todos sabemos”. La traducción de la Biblia de James Moffatt dice: “por supuesto”. Era tan bien sabido en la Iglesia Temprana que Jesús, convirtiéndose en la semilla de Adán, tenía que tomar parte en carne y sangre y no en la naturaleza de los ángeles, que Juan hizo esta prueba para ver si la fe de uno estaba puesta o no en Dios: “y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios” I Juan 4:3.

Verso 17: “Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo

La profundidad de la sabiduría del plan de Dios es tal que Jesús tiene que compartir las aflicciones y las dificultades que asechan al hombre para poder ser un Alto Sacerdote fiel y misericordioso. Él es misericordioso porque se da cuenta de las dificultades, las debilidades que asechan a sus seguidores y a la humanidad en general. Él fue hecho como sus hermanos “en todas las cosas”. Ésto no significa que Jesús era imperfecto, o que el pecado tenía simiente en su naturaleza. Sus hermanos son nuevas criaturas y Jesús fue tentado en todos los aspectos en que éstas lo fueron.

Como resultado de la observación y asociación, Jesús se familiarizó con los juicios que esperan a la humanidad entera y particularmente a aquellos que se convirtieron en Nuevas Criaturas, que aun tienen que batallar los pecados de la carne. Ésto conduele más a Jesús, le da más misericordia con nosotros como nuestro Abogado en el trono de la gracia. De la misma manera se conduele como Cabeza de la clase sacerdotal que tendrá que encargarse del mundo de la humanidad durante el milenio. Él estará contento de hacer todo lo posible para ayudar a los arrepentidos de la raza humana a volver a la perfección y reunirse en la unidad con el Padre celestial, el Creador.

Verso 18: “Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentado

Jesús sufrió la agonía de mente y cuerpo en lugar de dar paso al mal. Por ello fue que él fue tentado y por esta razón, él sabe como ayudarnos en el momento en que lo necesitemos. La ayuda que Jesús nos traerá está sugerida en la Palabra y en ella somos intruídos en el correcto uso de la Divina gracia que se nos hace posible a través del misericordioso Alto Sacerdote. Cuando vayamos al Padre en la plegaria, estemos seguros que el mérito de su sacrificio fue puesto a nuestro nombre. También se nos asegura que nuestros imperfectos esfuerzos son aceptados. Él puede ayudarnos por el poder de la condolencia, el conocimiento y su experiencia. Para ello es que fue perfectamente entrenado.


Descubriendo tu Misión

Verso clave:El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; A predicar el año agradable del Señor” Lucas 4:18,19

Escritura seleccionada: Lucas 4:16-26, 28-30

Inmediatamente después de la tentación de Jesús en el desierto, él fue guiado por el Espíritu a Galilea y “enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado por todos” Lucas 4:14,15. Entonces “vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer” Vs. 16.

Cuando el libro del profeta Isaías le llegó a sus manos, él comenzó a leer “El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; A predicar el año agradable del Señor” “...enrollando el libro, lo dio al ministro, y se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él” y Jesús dijo: Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros” Vs. 18-21.

Todos los presentes hablaron bien de él y estaban sorprendidos. “Y todos daban buen testimonio de él, y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca...

Lucas 4:22. Otros dijeron: “¡Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre!” Juan 7:46. ¿Cómo puede ser ésto? “y decían: ¿No es éste el hijo de José?”. “Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo; de tantas cosas que hemos oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en tu tierra. Y añadió: De cierto os digo, que ningún profeta es acepto en su propia tierra.” Lucas 4:22:24.

Mientras que esta profecía anunciaba que la comisión de Jesús primariamente se cumpliría en él, entendimos también que aplicaba a todo miembro del cuerpo de Cristo, ungido con el Espíritu del Señor. Cada uno es un comisionado predicador del Evangelio, para servir al Señor y para dar su vida por la hermandad.

Jesucristo como cabeza de la iglesia, que es su cuerpo, fue ungido “con óleo de alegría”, el Espíritu Santo. (Heb. 1:19). Le fue vertido y “Porque de su plenitud tomamos todos...” (Juan 1:16). Es un gran privilegio ser los co-herederos y ser consagrados “En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa...” (Efe. 1:13) bajo la ungición de nuestra Cabeza.

David nos dio una imagen típica de la ungición de Jesús. (Salmos 133:1-3; Lucas 4:18). Este aceite celestial ungido, representa al Espíritu Santo iluminando a todos aquellos que Dios acepta provisoriamente como miembros del Real Sacerdocio. A todos aquellos marcados por el Espíritu Santo como miembros provisorios de la Nueva Creación, Dios les asegura “No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo” (Juan 17:16). “...yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé” Juan 15:16.


Contando el Costo

Verso clave:Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo” Lucas 14:27

Escritura seleccionada: Lucas 9:57-62

Un discípulo es un pupilo, uno que sigue a un maestro o a un líder. El Señor les ha prometido a sus discípulos algunas grandes bendiciones. Si son obedientes, serán grandemente bendecidos con la vida eterna, se sentarán con él en su trono y estarán donde él esté. Una pregunta importante que se nos presenta es ¿qué es lo que envuelve el ser discípulo? ¿Es algo difícil o simple? Primero que nada debemos saber que significa el ser discípulo y que significa la cruz. ¿Cómo podremos entrar a la escuela de Cristo? El Señor aquí y en dondequiera nos comunica los términos.

Jesús dijo: “Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo” (Lucas 14:27). Aquellos que fielmente carguen con la cruz son el “pequeño rebaño”, los “selectos” . Con respecto a ésto Jesús dice, “porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan” (Mateo 7:14). Nuestro Señor dijo que sería mejor no cargar la cruz hasta que tengamos la determinación de ir hasta el final. Nos ilustra ésto diciendo: “Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios” Lucas 9:62

El Señor, muy distintivamente, dijo lo que implicaría la cruz a aquellos que se conviertan en sus discípulos. Él dijo que quien fuera su discípulo sufriría persecución. Nos advirtieron que cargando la cruz sería un tema serio. Si, por lo tanto, determinas que vas a ser su discípulo, siéntate y cuenta el costo. Si cargas la cruz, no es sólo para cargarla, sino para hacerlo fielmente hasta la muerte.

Nuestro Señor dijo: “Cuando os persigan en esta ciudad, huid a la otra; porque de cierto os digo, que no acabaréis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo de Hombre” (Mateo 10:23). Por lo tanto, el no tener oposición es prueba de que Dios no está lidiando con nostros como hijos, no que nos esté favoreciendo. El Apóstol Pablo nos dice: “Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos” (Hebreos 12:8, Nueva Versión Estándar). Sólo aquellos con los que el lidia como hijos pertenecerán al Sacerdocio Real y participarán en su Reino glorioso.

La carga de la cruz es la manera de crecer en carácter para el consagrado hijo de Dios. Si no se nos presentan juicios y dificultades, si no se interfiere con nuestros apetitos y deseos terrenales en nuestro servicio al Señor y la Verdad, debemos de estar seguros que estamos cometiendo algún error. No nos hemos convertido en sus discípulos. Pero si hemos de tener esos juicios, el apóstol nos dice que debemos considerarlos como aflicciones pequeñas y que se están solucionando: “Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria”. Estamos mirando el tiempo presente, no por las cosas que se ven como el aplauso y gloria terrenales sino por la gloria terrenal, por las cosas que el Señor ha prometido a aquellos que lo amaron. (II Cor. 4:17,18). El Señor bendecirá verdaderamente a aquellos que, habiendo puesto la mano en el arado y sin mirar atrás, hayan resistido lo duro y se hayan regocijado en el privilegio del servicio y del sacrificio. Ellos serán recompensados con la naturaleza Divina, a la cual no se le puede poner ningún costo.


Celebrando la Reconciliación

Verso clave:...porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse” Lucas 15:24

Escritura seleccionada: Lucas 15:1-2, 11-24

La lección de hoy , basada en la parábola de jesús del hijo pródigo, ha sido considerada como una de las obras supremas del Maestro. En la parábola, el padre que tiene dos hijos representa a Dios. El hijo mayor representa a aquellos que han permanecido leales a Dios en su profesión hacia afuera y manteniendo su ley hacia adentro. El hijo más joven representa a aquellos que no son tan estrictos religiosamente como lo son con sus principios. Esta clase utilizó mal sus privilegios y oportunidades de auto gratificación, sin intentar vivir vidas celestiales.

Relatando esta parábola, Jesús dice: “También dijo: Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les repartió los bienes” (Lucas 15:11,12 Nueva Versión Internacional). Después de pasados unos días, el hijo menor vende su parte de la propiedad, deja la casa con el dinero y se va a un país lejano donde gasta su dinero en una vida llena de imprudencias. Gastó todo lo que tenía. Cuando una gran hambruna se extendió sobre ese país, él se quedó literalmente sin nada. Así fue que comenzó a trabajar para un ciudadano del país, quien lo mandó a su campo a cuidar de los cerdos. Él deseó poder llenarse con lo que los cerdos estaban comiendo, pero nadie le dio nada para comer: “Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre! Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros” vss. 17-19 NVI.

Entonces se levantó y volvió a su padre. Estaba todavía lejos de su casa cuando su padre lo vio. Su corazón se llenó de pena, corrió hacia él, le extendió los brazos, lo abrazó y lo besó. “Padre” dijo el hijo, “he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies” Lucas15:20-23 NVI

Cuan bien esto ilustra el amor de Dios: la mejor vestidura, el becerro engordado y las otras atenciones que recibió el hijo arrepentido ilustran muy bien las provisiones que Dios toma para los que retornan a él por el camino del pecado. El vestido y todas las demás bendiciones son provistas a través de Cristo, cubriendo todas las imperfecciones de la naturaleza caída.

Mientras que nuestro Señor era conocido por su amigabilidad para con los pecadores, nunca se le vio condenar el pecado. Desde este punto de vista, las fiestas de las cosas abundantes provistas para los pecadores en Israel, corresponde a la fiesta que se celebrará, en su momento, para toda la humanidad. Por ello, dentro del arreglo del Reino, (Isa. 25:6) todos podrán retornar a la casa del Padre y todos aquellos que retorner recibirán a Dios a través de Cristo.


Preparándonos para el Futuro

Verso clave:Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas” Lucas 16:13

Escritura seleccionada: Lucas 16:1-13

Esta parábola del mayordomo injusto fue relatada por Jesús como reprimienda al espíritu de los fariseos. Éstos creaban fuertes cargas a otros pero los esquivaban mientras simulaban obediencia de corazón a la ley.

En los viejos días, más que ahora, era costumbre que los hombres ricos de nombraran mayordomos. Dicho mayordomo tenía control absoluto de las pertenencias de su amo y tenía el poder de lo que hoy es un abogado. Algunos mayordomos eran fieles, otros eran extravagantes. El mayordomo mencionado en la parábola de nuestro Señor, era extravagantemente insatisfactorio. Su amo decidió dispensar de sus servicios y le pidió el estado de las cuentas (Lucas 16:2). En sus libros habían cuentas que mostraban que eran deudores los cuales aparentemente no había podido pagarles. El mayordomo concluyó que si reducía la cantidad de dichas deudas, probablemente los deudores podrían hacer un pago antes de darle los libros a su sucesor. Teniendo en su poder cien medidas de aceite, le dijo que podría reducir la deuda a cincuenta. Otro teniendo en su poder cien medidas de trigo (500 a 1400 litros), le dijo que lo podría bajar un veinte por ciento. Tal uso de su autoridad le sirvió para hacerse amigos, a los que salieron favorecidos. Su amo lo felicitó por tal sabiduría. Vs. 8

Aplicando esta parábola, Jesús proporcionalmente condenó a los fariseos por tomar el camino opuesto. Ellos creaban cargas muy grandes a la gente y los desmoralizaba. Todo esto era hipocresía de su parte, pues ellos sabían que no podrían cumplir los requerimientos de la Ley, que es la medida completa de la habilidad del hombre perfecto. La actitud correcta habría sido el confesar sus trampas, el intentar dar lo mejor, apelar a Dios por misericordia y enseñarle a la gente común a hacer lo mismo.

Con los seguidores de Jesús, todas nuestras cosas en el tiempo presente le pertenecen a Dios, pues las hemos consagrado a él. Sin embargo, todas las cosas de la vida futura, nos pertenecerán pues Dios nos las ha prometido si somos fieles mayordomos hoy, manejando las cosas que hemos dado a Dios devotamente. Ahora viene un período de juicios y pruebas.

Jesús, en nuestro verso clave, nos dice que nosotros no podemos servir a Dios y a mammón (riquezas y tesoros). Él dice: “El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel; y el que en lo muy poco es injusto, también en lo más es injusto. Pues si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿quién os confiará lo verdadero? Y si en lo ajeno no fuisteis fieles, ¿quién os dará lo que es vuestro? Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas” Lucas 16:10-13


Tiempo de Preparar

Verso clave:Yo a la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene tras mí, cuyo calzado yo no soy digno de llevar, es más poderoso que yo; él os bautizaráen Espíritu Santo y fuego” Mateo 3:11

Escritura seleccionada: Mateo 3:1-8,11-17

Juan el Bautista fue el último de los profetas, y como Jesús declara: “De cierto os digo: ...no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista...” Mateo 11:11. En Mateo 3:3 leemos conceniente a Juan: “Pues éste es aquel de quien hablóel profeta Isaías, cuando dijo: Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor, Enderezad sus sendas” Al tiempo de este hecho se nos dice que entre los judíos “el pueblo estaba en expectativa” Lucas 3:15.

La misión de Juan el Bautista fue levantar a la gente de Israel al hecho de que el Mesías ya había llegado y que la inauguración del por tanto tiempo prometido reino de Dios, se hallaba al alcance de la mano. Juan le dijo a la gente que deberían empezar a prepararse inmediatamente si deseaban compartir ese reino, en armonía con su gran ansiado deseo. Deberían arrepentirse por sus violaciones a la Ley y deberían volver de sus pecados y que su reforma sería simbolizada por el bautismo.

Juan creía fielmente cuando les decía a su audiencia que sus trabajos de predicador y de bautismo eran sólo la preparación para la más grande enseñanza de todas y el más alto bautismo que el Mesías iba a instituir.

En el mensaje Juan prevenía a aquellos que lo estaban escuchando que: “ya también el hacha estápuesta a la raíz de los árboles; por tanto, todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado en el fuego” Mateo 3:10. Esta era una forma figurativa de decir que un tiempo de prueba individual se avecinaba a los judíos y a todos aquellos que no cargaran la “buena fruta” no se los identificaría con el reino.

Aquellos que no cargaran la fruta necesaria serían cortados de los favores divinos y puestos en el feroz problema en el cual la Edad de los Judíos terminaría y su existencia nacional cesaría. Llamando la atención a esta materia, el Apóstol Pablo dice: “pues vino sobre ellos la ira hasta el extremo” I Tes. 2:16.

Continuando en Mateo 3:11 (Versión Estándar Revisada) Juan dice: “Yo a la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene tras mí, cuyo calzado yo no soy digno de llevar, es más poderoso que yo; él os bautizaráen Espíritu Santo y fuego” .

Él ilustró el carácter del trabajo del Mesías en su nación, comparándolo con la aventadora de desperdicios de trigo. Él dijo que el Mesías iría a “recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará” (vs12). En su profecía los desperdicios de la nación fueron tirados al fuego del problema que consumió a Israel como nación en el año 70 D.C.

Juan el Bautista entendió que él no estaba cumpliendo con las características del antitípico Elías. Cuando los sacerdotes y levitas le preguntaron a Juan: “¿Qué pues? ¿Eres tú Elías?... Dijo: No soy.” Juan 1:21. Pero Jesús dijo “Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir” Mateo 11:14. Él quiso significar que, para aquellos que reconocieron su mensaje y lo obedecieron, que son los discípulos del Señor, Juan cumplió el trabajo de Elías. El antitípico Elías está compuesto por los seguidores de Jesús en la carne, quienes también tienen que hacer trabajos preparatorios en el mundo, introduciendo al Mesías en gloria en su Segundo Advenimiento.


Tiempo de Pruebas

Verso clave:Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás” Mateo 4:10

Escritura seleccionada: Mateo 4:1-14

Cuando a sus treinta años, Jesús fue hasta Juan el Bautista en el Jordán para ser bautizado, “los cielos le fueron abiertos” Mateo 3:16.

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