| ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA |
Lección Cuatro
Ignorando la Verdad Clara de Dios
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Versículo Clave: “Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa.” Escrituras Seleccionadas: |
LA SOBERANÍA y el poder ilimitado de Dios Todopoderoso sobre toda su creación se ven “claramente”, como declara nuestro versículo clave, en las cosas visibles de la naturaleza. “Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos.” “El cuenta el número de las estrellas; a todas ellas llama por sus nombres. Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; y su entendimiento es infinito.” (Sal. 19:1; 147:4,5) Los atributos característicos de sabiduría, amor, misericordia, justicia y poder, también son evidentes a los que entienden sus planes y propósitos. Se nos dice, “Dios es amor”, y que “de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” —1 Juan 4:8; Juan 3:16
Para revelar su carácter plenamente, el Padre celestial, en su sabiduría, ha permitido el permiso del mal para que la humanidad pueda aprender que el “pecado” es “sobremanera pecaminoso.” (Rom. 7:13) Parte de la gran lección que el hombre está aprendiendo con respecto al pecado es que nada está oculto a los ojos de nuestro Creador. Todas las cosas están abiertas a su visión, y finalmente se revelarán por lo que son verdaderamente. Jesús dijo, “Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz.” (Marcos 4:22, Nueva Versión Internacional) Estas palabras aleccionadoras están en armonía con las demás Escrituras que señalan que habrá sentencia dictada a las naciones así como a los individuos, con todo el mal y el pecado manifiestos a los ojos de Dios.
En los versículos de nuestra lección, Pablo dice, “La ira de Dios viene revelándose desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los seres humanos, que con su maldad obstruyen la verdad. Me explico: lo que se puede conocer acerca de Dios es evidente para ellos, pues él mismo se lo ha revelado. Porque desde la creación del mundo las cualidades invisibles de Dios, es decir, su eterno poder y su naturaleza divina, se perciben claramente a través de lo que él creó, de modo que nadie tiene excusa.” (Rom. 1:18-20, NVI) En el versículo 18, Pablo habla de los que “obstruyen” o “detienen” la verdad. Se ha seguido esta práctica a lo largo de la historia del mundo, empezando con Satanás, quien obstruyó la verdad al decirle a Eva la gran mentira, “No moriréis.” (Gén. 3:4) Bajo la influencia maléfica del Adversario, la humanidad en general ha seguido una trayectoria similar, haciendo “de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz.” (Isa. 5:20) En efecto, “el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios.” —2 Cor. 4:4
La Biblia nos asegura, sin embargo, que el reinado del pecado y de la muerte, pronto llegará a su fin. Esto se logrará mediante el plan de salvación de Dios, centrado en “el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.” (Juan 1:29) El salmista habla del momento en que el Padre celestial les dirá, “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.” (Sal. 46:10) Al final del actual “tiempo de angustia” sobre la tierra, el Señor mandará a las naciones que cesen de sus intentos inútiles para salvarse a sí mismos—“estad quietos” y lo reconozcan como su líder. Dios mostrará a toda la humanidad que la única base verdadera para la paz es la justicia, y él les dará la oportunidad de aprender gradualmente sus caminos. Estamos seguros de que su prometido reino será glorioso, y aunque “por la noche durará el lloro… a la mañana vendrá la alegría.” —Sal. 30:5