| ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA |
Lección Cinco
Consuelo Concedido a Través de la Oración
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Versículo Clave: “Y nuestra esperanza respecto de vosotros es firme, pues sabemos que así como sois compañeros en las aflicciones, también lo sois en la consolación.” Escritura Seleccionadas: |
DESDE EL principio de esta epístola, Pablo da testimonio de la autoridad divina que había recibido para su ministerio, identificándose como “apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios.” Él no se nombró a este puesto, ni tampoco recibió su ordenación de manos de hombre. Al saludar a los hermanos de Corinto, él expresó su deseo de que debieran recibir la gracia y la paz de Dios el Padre por medio de su hijo, Jesucristo. —2 Cor. 1:1, 2
Pablo continuó, diciendo: “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios.” (vss. 3, 4) Pablo era capaz de consolar a otros porque, aunque había aguantado muchos sufrimientos por el hecho de ser vituperado por el nombre de Cristo, no obstante recibió consuelo divino que lo apoyaba en medio de sus aflicciones. —vss. 5, 6
Nuestro versículo clave subraya la confianza de Pablo de que los sufrimientos de los hermanos de Corinto serían más que compensados por el gozo de su condición de engendramiento espiritual como nuevas criaturas en esta vida. Si fueran fieles, tendrían la perspectiva adicional de un nacimiento espiritual y de obtener una herencia celestial. Esto los capacitaría de regocijarse en la presencia del Padre por toda la eternidad.
Entonces, Pablo alude a las duras pruebas que le sobrevinieron en Asia, aunque no se especifica la naturaleza exacta de ellas. Sin embargo, estaban tan abrumadoras, que previó la posibilidad de la muerte. No obstante, reconoció que Dios, que lo había libertado en el pasado, seguiría proporcionándole la fuerza necesaria para soportarlas hasta que fuera liberado de forma permanente de las tribulaciones asociadas con su fidelidad en seguir las huellas del Maestro. —vss. 8-10
En el versículo 11 leemos: “Cooperando también vosotros a favor nuestro con la oración, para que por muchas personas sean dadas gracias a favor nuestro por el don concedido a nosotros por medio de muchos.” Aquí Pablo reconoce el valor de oración intercesora a su favor, de ahí dándonos un ejemplo de imitarse a medida que rogamos al trono de la gracia celestial para proporcionar socorro a los creyentes consagrados quienes, de otra manera, pudieran desmayarse bajo el peso de varias pruebas.
La persecución por causa de la justicia es algo que todos los elegidos de Dios experimentarán en sus vidas. Según la carne, ninguno de nosotros desea tales sufrimientos. Sin embargo, debido a que nos hemos comprometido a seguir el ejemplo del Maestro, debemos esforzarnos por proclamar la verdad del reino de Dios y las bendiciones para la humanidad a pesar de la oposición que podamos encontrar de parte de otros. Las pruebas que soportamos en la actualidad son sino aflicciones leves, en comparación con la gloria que deberá seguir, si somos fieles.
Que cada uno de nosotros aprecie nuestras muchas bendiciones, incluso cuando somos perseguidos, como una fuente de fuerza mientras nos esforzamos por ser fieles a nuestra vocación. —Mat. 5:10-12