ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA

Lección para 16 de febrero

Mostrad Vuestra Fe Por Vuestras Obras

Versículo Clave: “Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta.”
—Santiago 2:26

Escritura Seleccionada:
Santiago 2:14-26

SANTIAGO AFIRMA que no es posible que una persona simplemente tenga una fe que no sea acompañada de obras de obediencia y, no obstante, sea agradable a Dios. Tampoco contradice las palabras de Pablo. “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.” —Ef. 2:8, 9

Por el contrario, Pablo comprendió la necesidad de las obras con el fin de demostrar el carácter de fe, diciendo, “Ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor.” (Fil. 2:12) Santiago también no limita la fe meramente a los asuntos espirituales, sino que indica que un creyente que fallaría de ayudar a un hermano que tenía una necesidad temporal daría pruebas de una fe muerta, que no se corresponde con los hechos de la compasión. —Santiago 2:14-17

La esencia del énfasis de Santiago en esta lección es que una fe viviente no se puede separar de hacer obras en el servicio de Dios. En un escenario hipotético, habla de dos personas que debaten la importancia relativa de la fe y las obras. “Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras. Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan. ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta?” —vss. 18-20

Haciendo referencia a dos personajes del Antiguo Testamento, Santiago recuerda, en primer lugar, cómo Abrahán demostró su vida de fe, ofreciendo a su hijo Isaac como sacrificio en obediencia al mandato de Dios. Esto demostró que Abrahán confiaba en Dios, aunque no sabía exactamente cómo terminaría el asunto. Escribiendo acerca de este mismo incidente, Pablo señaló también que Abrahán creía que Dios levantaría a Isaac de entre los muertos a fin de cumplir su propósito de bendecir a todas las familias de la tierra a través de su simiente. (Heb. 11:17-19) Esta demostración de fe por la obediencia de Abrahán en llevar a cabo el mandato de Dios fue el medio por el cual Abrahán fue contado justificado, o justo, en el juicio de Dios. —Santiago 2:21-24

Otro ejemplo de obediencia fiel se observó en que Rahab, la ramera cananea, también fue justificada por sus obras. Ella se enteró de que un ejército estaba avanzando hacia la ciudad de Jericó, donde residía, y, luego determinó identificarse con el Dios de Israel por esconder a los dos espías y despacharlos en seguridad cuando sus vidas estaban en peligro. (Jos. 2:1-24) Santiago declara que las acciones de Rahab en este asunto dieron pruebas de su fe en Dios por buenas obras que la acompañaban, y también se consideraba justa desde el punto de vista divino. “Asimismo también Rahab la ramera, ¿no fue justificada por obras, cuando recibió a los mensajeros y los envió por otro camino?” —Santiago 2:25

Nuestro versículo clave enfatiza la necesidad de manifestar la fe a través de la actividad en el servicio de Dios. Que este principio sierva para motivar a todos los verdaderos creyentes en Cristo de hacer con fuerza lo que sus manos encuentran, como prueba de que tenemos una fe viviente.



Asociación De los Estudiantes De la Biblia El Alba