ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA

Lección para 12 de mayo

Equipado con Esperanza

Versículo Clave: “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia.”
—2 Pedro 1:3

Escritura Seleccionada:
2 Pedro 1:3-14

EL ESCRITOR DE LA epístola se identifica con el doble nombre Simón Pedro. Tal vez esto se hizo para distinguir los dos aspectos importantes de su vida, antes y después de que él se convirtió en un discípulo de Cristo. (2 Ped. 1:1) En su saludo a los hermanos, Pedro indica que la abundancia de la gracia y la paz podrían alcanzarse sobre la base de un conocimiento profundo de Dios y de nuestro Salvador, Jesucristo. –vs. 2

Nuestro versículo clave enfatiza que el poder de Dios será determinante para la transformación de los creyentes consagrados y el desarrollo progresivo de los atributos esenciales necesarios para la excelencia moral y el logro de la naturaleza divina.

En el versículo 4 de nuestra lección, Pedro indica que, como medio de ayudar a los creyentes en el camino cristiano, hemos recibido de la Palabra de Dios “preciosas y grandísimas promesas”, las cuales, al meditarlas y aplicarlas en nuestros corazones, nos proporcionarán lo que es necesario para que la esperanza de una herencia divina sea una realidad en nuestras vidas.

Los siguientes pasajes enumeran áreas específicas necesarias para nuestro crecimiento y desarrollo espiritual, las cuales se denominan a veces “La Escalera Cristiana.” “Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.” –vss. 5-7

La importancia de las anteriores virtudes en los creyentes que esperan llegar a ser parte del cuerpo de Cristo se pone de manifiesto en las listas de atributos similares encontradas en otras partes de las Escrituras. Estos incluyen las bienaventuranzas de Jesús, los frutos del espíritu registrados por Pablo, y el esclarecimiento de Santiago respecto a la sabiduría que viene de lo alto. –Mat. 5:1; Gal. 5:22, Santiago 3:17

Hemos sido inspirados de dar nuestras vidas en consagración a Dios, porque hemos llegado a apreciar su magnífico plan de salvación. Este plan ofrece la oportunidad no sólo para que el mundo de la humanidad se recupere de la muerte en el cual el padre Adán hundió su posteridad, sino que también ha provisto preciosas y grandísimas promesas para la iglesia a compartir con el Redentor en bendecir a todas las familias de la tierra en el reino de Dios. Hemos visto cuán razonable es la filosofía de la expiación y aceptamos y declaramos estas buenas nuevas de salvación, por causa de nuestra confianza y fe en la Palabra de Dios. Hemos recibido en nuestros corazones la verdadera doctrina basada en las palabras de Cristo y de los apóstoles inspirados. Pedro nos recuerda que no sólo debemos creer en la verdad, sino que el efecto buscado en nuestras vidas es que debemos vestirnos de la santidad y seguir realmente las huellas del Maestro.

A la vista de estas garantías, cuán poderoso es el resumen de Pedro en cuanto al resultado final de seguir sus amonestaciones en esta lección. “Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás.” –2 Ped. 1:10



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