ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA

Lección para 24 de febrero

Disciplinas Espirituales Para la Nueva Vida

Versículo Clave: “Dí a Arquipo, presta atención al ministerio que has recibido en el Señor.”
—Colosenses 4:17

Escritura Seleccionada:
Colosenses 4:2-6, 17

EN EL ÚLTIMO Capítulo del libro de Colosenses, Pablo exhorta a los hermanos en cuanto a la necesidad de diligencia en la oración, especialmente en nombre de aquellos testigos del plan de Dios. (Col. 4:2-4) Este es un aspecto importante de nuestro agradecimiento por el privilegio del discipulado cristiano. Fidelidad en la pronta venida y tardanza ante el trono de la gracia es indispensable para nuestro crecimiento y desarrollo en Cristo. Como espíritu-engendrado criaturas nuevas, estamos en el proceso de desarrollo para ayudar a lograr el cumplimiento de la promesa Abrahámica para bendecir a todas las familias de la tierra. (Gén. 12:3) En nuestras oraciones, debemos expresar nuestro apoyo a los esfuerzos hechos para promover el mensaje del reino.

Deberíamos tener gran compasión por la familia humana y como se nos presenten las oportunidades, debemos dar testimonio sobre el glorioso plan de salvación. Este plan ha sido proporcionado para brindar la oportunidad de vida para el mundo de la humanidad. El hombre tiene la imperiosa necesidad de tal comodidad, dados los horrores de la enfermedad, conflictos religiosos, el hambre, las guerras, la violencia, la inmoralidad, la muerte y otras calamidades que existen en la actualidad a escala mundial. Imitemos el ejemplo de Pablo, grabado para nuestra exhortación: “Aunque estoy predicando el evangelio, no tengo nada para gloriarme: es más bien un deber que me incumbe: y ¡ay de mí, si no predico el Evangelio!” –I Cor. 9:16

Otro aspecto importante del estilo de vida del creyente es para redimir el tiempo de las preocupaciones temporales y enfocarse en esfuerzos espirituales. “Todo lo que te viniere a tu mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque no hay obra, ni industria, ni ciencia, ni sabiduría, en el Seol, adonde fueres.” (Ecles. 9:10) Hay muchos caminos de servicio en la causa del Señor que están disponibles para todos nosotros. En la medida en que seamos fieles en hacer incluso las cosas pequeñas con el fin de agradar a Dios, él nos recompensará con mayores oportunidades para el servicio. Pensemos en el alivio y consuelo que podemos otorgar a la hermandad por la pluma, teléfono, u otras formas de comunicación. Además, debemos aprovechar cada oportunidad para reunir con otros de la misma preciosa fe en reuniones y convenciones, además de participar en frecuente estudio personal de la Palabra de Dios.

En sus escritos, Pablo a menudo reconoció y alentó a muchos de sus compañeros por su nombre, en particular, a aquellos que le ayudaron en su ministerio. No sólo fueron el soporte de sus esfuerzos, pero también fueron sin duda los instrumentos de comodidad y de fraternidad. (Col. 4:7-14) En nuestro versículo clave, Pablo exhorta a Arquipo que tenga en cuenta el ministerio que él había recibido del Señor y para su cumplimiento, aunque los detalles en cuanto a su naturaleza no son detallados. Nosotros, de igual manera, como hijos consagrados de Dios, debemos ser diligentes en servirle con cada fibra de nuestro ser.

Como el cuerpo de Cristo se está desarrollando actualmente, todos los que han sido aceptados como miembros a prueba puede dar fe de la influencia de fortalecimiento del Señor en sus vidas, así como él espera a que su Esposa se complete. Que cada creyente sea impulsado a mayor fervor en su caminar sacrificial por la gloriosa promesa de ser asociado con Cristo Jesús para ayudar a restaurar la humanidad a la perfección y la vida eterna durante el reino de Dios. –Apoc. 20:6



Asociación De los Estudiantes De la Biblia El Alba