ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA

Lección para 24 de julio

Deje que Dios Gobierne

Versículo Clave: “Cuando Gedeón oyó el relato del sueño y su interpretación, adoró; y vuelto al campamento de Israel, dijo: Levantaos, porque Jehová ha entregado el campamento de Madián en vuestras manos.”
– Jueces 7:15

Escritura Seleccionada:
Jueces 6 – 8; 21:25

DESPUÉS DE LA JUDICATURA fiel de Débora y Barac, Israel otra vez hizo “lo malo ante los ojos de Jehová; y Jehová los entregó en mano de Madián por siete años.” (Jueces 6:1) Los madianitas eran tantos en números que rápidamente tomaron toda la tierra, empujando a los israelitas a Gaza y abandonándolos sin tierra para cultivar o sostener al ganado. Como había pasado a menudo antes, Israel finalmente clamó a Jehová debido a su situación desesperada. —Jueces 6:7

Encontraron a Gedeón, un israelita joven fiel, que estaba sacudiendo trigo en el lagar fuera de la vista de los madianitas para ayudar a mantener su familia. Esto captó la atención de Dios, que envió a un ángel para aparecerle. El ángel le dijo, “lo malo ante los ojos de Jehová; y Jehová los entregó en mano de Madián por siete años.” (Jueces 6:12) Gedeón inmediatamente preguntó al ángel en cuanto a por qué tanto mal había sobrevenido a Israel y ahora parecía que estaban abandonados. Dios, por medio del ángel, respondió, “Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo?… Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre.” —Jueces 6:14, 16

Gedeón deseó señales de que lo que el ángel le había dicho era cierto. La primera de éstas era que él presentaría una ofrenda a Jehová, solicitando una señal que demostraría que la había aceptado. Él mató un cabrito e hizo panes sin levadura y los puso sobre un canastillo debajo de una encina. El ángel tocó la ofrenda con su báculo; subió fuego de la peña, consumiendo la carne y los panes sin levadura. Entonces el ángel se marchó. Gedeón respondió, “Ah, Señor Jehová, que he visto al ángel de Jehová cara a cara.” —Jueces 6:22

La siguiente señal solicitada por Gedeón era que él pondría un vellón de lana en la era y lo dejaría allí toda la noche. Por la mañana, si el rocío estuviera sólo en el vellón y no en la era que lo rodeaba, Gedeón dijo que “entonces entenderé que salvarás a Israel por mi mano, como lo has dicho. Y aconteció así.” (Jueces 6:37-38) Deseando estar absolutamente seguro, Gedeón hizo una última petición de Dios, simplemente invirtiendo la señal anterior. De nuevo, Dios favorablemente contestó a Gedeón la próxima mañana haciendo que el rocío estuviera en la era, pero el vellón estaba completamente seco. —Jueces 6:39-40

Cuando Gedeón se preparó para luchar contra los madianitas, Dios le informó que los treinta y dos mil hombres que había reunido eran demasiados. A los que tenían temor se les pidió volver a casa. Esto redujo el número a diez mil. Entonces, éstos fueron llevados al agua para beber. Dios observó a aquellos que bebieron el agua con la lengua como lamen los perros y a aquellos que se doblaron sobre las rodillas para beber. Aquellos que bebieron el agua con la lengua eran sólo trescientos, pero éstos eran los que Dios deseaba. Aquellos que bebieron el agua con la lengua eran capaces de ver todo lo que pasara alrededor de ellos mientras bebían, mientras que aquellos que se doblaron en las rodillas y bebieron no podían ver sus alrededores y eran vulnerables. Así Gedeón, armado con sólo trescientos hombres, y siguiendo las instrucciones de Dios en cuanto al uso de trompetas, teas, y cántaros como sus “armas”, (véase Jueces 7:16-22) fue usado para entregar a los madianitas en manos de Israel como se declara en nuestro Versículo Clave.



Asociación De los Estudiantes De la Biblia El Alba