| ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA |
Lección para 15 de mayo
Adoración de Agradecimiento
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Versículo Clave: “Y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero.” Escritura Seleccionada: |
COMO UNA PROFECÍA del Tiempo del Fin, este capítulo describe algunas escenas finales de esta Edad Evangélica preparatorias al establecimiento del Reino Milenario cuando los seguidores santos de Cristo participen con él en la bendición de la familia humana. —Apoc. 20:6
Una visión acerca de cuatro ángeles que están de pie en los cuatro ángulos de la tierra deteniendo los cuatro vientos sugiere una gran tormenta de angustia que está siendo restringida de abrumar el presente orden social hasta que todos los fieles de la iglesia de Cristo estén reunidos. —Cap. 7:1-4
El número total que comprende el cuerpo de Cristo será ciento cuarenta y cuatro mil. (vss. 5-8) Después de mencionar esta clase se ofrece una descripción acerca de una “gran multitud” o una categoría diferente de individuos que están de pie delante del trono y delante del Cordero. —vs. 9
En nuestro Versículo Clave la gran multitud reconoce que su salvación se atribuye al Padre Celestial así como a Jesucristo.
La identidad de esta clase se trata en las escrituras después de la finalización de los ciento cuarenta y cuatro mil miembros de la iglesia de Cristo. “Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido? Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo; y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos.” —vss. 13-15
Esta gran multitud es una clase secundaria que alcanza una resurrección espiritual después de que el cuerpo de Cristo sea completado. En toda probabilidad ellos no fueron tan entusiastas como el rebaño pequeño en el cumplimiento de los términos del discipulado. Es por esta razón que tienen que experimentar la tribulación y deben lavar sus ropas antes de recibir la salvación.
Otro punto de considerar está relacionado con el servicio en el trono de Cristo. Leemos “Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono.” (Apoc. 3:21) La promesa de sentarse en el trono de Cristo está reservada para la iglesia, mientras que la gran multitud no estará en el trono, sino que servirá delante del trono.
La gran multitud se menciona otra vez en el Apocalipsis en un capítulo posterior. “Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya!, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina. Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.” —Apoc. 19:6, 7
Es causa de regocijo que este grupo de cristianos puede dar alabanzas al Creador aunque no sea parte de la iglesia. ¡Qué misericordioso es nuestro Dios!