| ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA |
Lección para el 12 de diciembre
Los profetas anunciaron el nacimiento del Mesías
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Versículo Clave: “Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emmanuel” Escritura Seleccionada: |
NINGUN TESORO ES MAS IMPORTANTE para la humanidad que la maravillosa promesa ofrecida con respecto al proceso por el cual sería cumplida la bendición y liberación de todos los pueblos de la maldición del pecado y muerte. Esto fue mencionado en nuestro texto con la mención del nombre Emmanuel, que significa “Dios con nosotros”. El anuncio sobre el nacimiento de Jesús a su madre María, era especialmente importante porque este niño fue engendrado por el poder divino, aunque María aún era virgen cuando dio a luz a su hijo. Él vino a cumplir la promesa hecha a Abraham: “y todas las familias de la tierra serán benditas en ti y en tu simiente” (Génesis 28:14).
Mencionamos la profecía: “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto” – Isaías 9:6,7.
“El principado estará sobre su hombro”, es figurativo en la autoridad, gloria y honor, que serán sobre el Señor. Le es dado desde el Padre a través de su gran ley de amor. El cambio en la dispensación se introdujo a través del Padre “tiempos de restauración” (Hechos 3:19-21). Este será el tiempo de Cristo para recibir el honor, la gloria y el dominio que se le prometió exclusivamente a él.
Partiendo del nacimiento de nuestro Señor como el niño nacido en Belén, fue presentado como el Hijo de Dios dado a nuestro favor. Su sacrificio se inició en el Jordán y culminó en el Calvario. Debido a su obediencia hasta la muerte, también “Dios lo exaltó y le dio un nombre que es sobre todo nombre” (Filipenses 2:9). Cuando asuma el control de los asuntos de la tierra, su carácter de amor y justicia se hará evidente, todo el poder será su regla en justicia. Se asegura a todos los fieles que su Reino será un tiempo de bendición, de paz y de alegría para todos los que aman la justicia y la verdad. Su nombre y título representan las cosas llenas de gracia que constituyen su carácter y serán traídas a la atención de toda la humanidad. Él es ‘maravilloso’, es grande más allá del poder de la comprensión humana. Como la imagen misma de la persona del Padre, él será un líder e instructor de su pueblo, a todos los que quieren ser “enseñados por Dios” (Juan 6:45). Él será el “Consejero”, cuyas instrucciones en justicia serán satisfactorias, respetado por la humanidad que busca un retorno al favor divino y una restauración completa de lo que estaba perdido.
Será llamado “Dios Fuerte”, “Poderoso” y sobre él recaerá todo el poder y la autoridad de Dios, su Padre. Él es llamado “Padre eterno”, un padre para siempre, porque él será el dador de la vida a todos los que aceptan vivir bajo los términos del Pacto, que fue sellado con su sangre preciosa y que se establecerá después a todos los miembros fieles del Cuerpo de Cristo, quienes han pasado más allá del velo – Hebreos 12:24.