ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA

Lección para el 12 de setiembre

Gedeón: Un Libertador para el Pueblo

Versículo Clave: “Y mirándole Jehová, le dijo: Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo?”

Escritura Seleccionada:
Jueces 6 – 8.

COMO PODEMOS RECORDAR en nuestros estudios, la historia de Israel desde el momento de la división de Canaán hasta la unción de Saúl como su rey se llama el período de los jueces; Josué fue el primer juez y Samuel el último. Estos jueces fueron providencialmente elegidos a esta posición. Sin embargo, como estos jueces no tenían ningún poder o autoridad, podría parecer lógico que cualquier poder o influencia que poseyeran era exclusivamente personal. Para dar peso o fuerza a su responsabilidad, implicaba el poseer un reconocimiento adecuado de ellos como divinamente designados. Este aspecto llevó a la gente a mirar continuamente a Dios por sus jueces y líderes. A través de estos hombres, Dios continuó su gobierno personal sobre Israel. La elección de los jueces es una ilustración de su voluntad. “Entonces respondió y me habló diciendo: Esta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos” – Zacarías 4:6.

Un juez, en la antigüedad, fue quien ejecutó la justicia y alivió a los oprimidos. Sufrían opresión por sus enemigos a causa de la transgresión contra Jehová, pero había llegado el momento de Israel, esta bendición ocurrió con el levantamiento de los jueces. Si tuviéramos que leer el Libro de los Jueces como una historia completa de Israel, de los 450 años que fueron usados por Dios, observaríamos un panorama bastante sombrío. Los años transcurren con una época feliz de prosperidad para Israel y asimismo los momentos de desobediencia con disciplina Divina. También notaremos sus penas por las transgresiones y la liberación de sus problemas a través de los jueces o líderes, a quienes Dios nombró. Ellos fueron los representantes de Dios y como tal, los aspectos espirituales de Israel eran más sublimes con los jueces que cuando estuvieron sujetos a los reyes. Cabe señalar que este aumento de los jueces fue un acto de la Gracia de Dios, con el fin de bendecir a la gente, no para condenarlos y castigarlos. “Y Jehová levantó jueces que los librasen de mano de los que les despojaban” – Jueces 2:16. Los líderes espirituales con nombramiento Divino siempre estarían marcados por las victorias espirituales.

Esto nos lleva a considerar a Gedeón, un hombre de nobleza natural que fue designado por Dios como sexto juez de Israel. Debido a lo malo que la gente había hecho ante los ojos de Jehová, habían sido entregados en manos de los madianitas. Dios enviaría un ángel para hablar con Gedeón, para que lo inspirara como su libertador de las manos de sus opresores. “¿No te envío yo?” (Jueces 6:14). Sin embargo, le fueron dadas a Gedeón evidencias de Dios a través de su santo ángel que estaba haciendo su Voluntad Divina. El relato nos dice que Gedeón fue a reunir un ejército para ir contra los madianitas. Al principio, el ejército estaba conformado por más de 22,000 hombres, pero cuando Dios dijo que el grupo era demasiado grande, determinó la forma como reducir el número a 300 (Jueces 7:7). El enemigo sería sorprendido a través del sonido de las trompetas y de los cántaros quebrados, el resplandor de las teas y el grito de “¡Por la espada de Jehová y de Gedeón!” (Jueces 7:17-20).



Asociación De los Estudiantes De la Biblia El Alba