LECCIONES DE ESTUDIO DE LA BIBLIA INTERNACIONAL

Llamado al arrepentimiento

Versículo clave: “Diles, pues: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos a mí, dice Jehová de los ejércitos, y yo me volveré a vosotros, ha dicho Jehová de los ejércitos”
—Zacarías 1:3

Escritura seleccionada:
Zacarías 1:1-6; 7:8-14

COMO UNO DE LOS PROFETAS DE DIOS, Zacarías repetidas veces habló de la necesidad que Israel manifestara un verdadero arrepentimiento, a fin de gozar de las bendiciones prometidas en el Pacto de Abraham. La carga de su corazón era que su pueblo, ahora bajo la dominación gentil, debía retornar a Dios y jurar obediencia a sus justos mandamientos – Zacarías 1:1,2.

Nuestro versículo clave contiene una expresión de la misericordia de Dios y su deseo de bendecir a Israel abundantemente si le buscan y obedecen. Zacarías también le recuerda a Israel que sus padres habían rechazado las advertencias de los antiguos profetas cuando les pidieron renunciar a sus malos caminos. “No seáis como vuestros padres, a los cuales clamaron los primeros profetas, diciendo: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Volveos ahora de vuestros malos caminos y de vuestras malas obras; y no atendieron, ni me escucharon, dice Jehová. Vuestros padres, ¿dónde están? y los profetas, ¿han de vivir para siempre? Pero mis palabras y mis ordenanzas que mandé a mis siervos los profetas, ¿no alcanzaron a vuestros padres? Por eso volvieron ellos y dijeron: Como Jehová de los ejércitos pensó tratarnos conforme a nuestros caminos, y conforme a nuestras obras, así lo hizo con nosotros” – Zacarías 1:4,6.

El libro de Zacarías contiene acontecimientos históricos en la relación de Dios con Israel. Además, es profético en la medida que aborda los acontecimientos futuros con respecto a esa nación, así como aspectos mesiánicos en el sentido que retrata las condiciones en la tierra cuando el Nuevo Pacto estará en funcionamiento bajo las normas de la justicia de Cristo. Por lo tanto, todos los cristianos deberían tratar de estudiar y aplicar las lecciones en sus vidas que les permita desarrollar el carácter necesario como parte del cuerpo de Cristo. “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza” – Romanos 15:4.

Dios usa mensajeros humanos para proporcionar instrucción de sus pactos con las personas y que deben ser atendidos. Antes del Primer Advenimiento de Cristo, los profetas fueron enviados para guiar al pueblo de Israel. Durante esta Edad del Evangelio, los cristianos pueden discernir la voluntad de Dios, obedecer las enseñanzas encontradas en toda la Biblia y observar en particular las palabras de Jesús y los apóstoles. Las principales advertencias de Dios por medio de Zacarías se aplican por igual a las personas del Antiguo Testamento como a los seguidores de Cristo – Zacarías 7:9,10.

La dureza de corazón del pueblo de Israel dio lugar al rechazo de Cristo como su Mesías durante el tiempo de su primer Advenimiento. Además, habían sufrido desde entonces ya que fueron un pueblo esparcido por todo el mundo (Zacarías 7:14). Ahora que han sido devueltos a su patria nacional, otras promesas de las Escrituras para su retorno al favor de Dios les esperan – Isaías 35:10.

El Padre Celestial ha determinado a través del sacrificio en la muerte de Jesucristo, erradicar el pecado en los creyentes arrepentidos durante esta edad del Evangelio y también para la humanidad durante el reino de Cristo. “Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo. Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos” – 1 Juan 2:2.



Asociación De los Estudiantes De la Biblia El Alba