| LECCIONES DE ESTUDIO DE LA BIBLIA INTERNACIONAL |
Estando Listos
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Versículo clave: “Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo” Escritura seleccionada: |
EN ESTA LECCIÓN EL Apóstol Pablo se está dirigiendo a los hijos de luz que han obtenido la salvación por nuestro Señor Jesús. Quienes se esfuerzan para estar listos como miembros de la novia de Cristo, y están aguardando la unión, como se escribe más adelante, “Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque ha llegado las bodas del cordero, y su esposa se ha preparado” Apocalipsis 19:7
El llamado a esta esperada clase de novia ha sido formulado a los seguidores de Cristo durante la edad del evangelio, y terminará cuando el actual período de la cosecha haya terminado. Creemos que nuestro Señor Jesús está ahora presente y que las señales de los tiempos indican que su llamado e invitación será pronto terminado.
Mientras que refiere a estas épocas y estaciones, Pablo escribe: “Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón en la noche; que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer en cinta, y no escaparán” (I Tesalonicenses 5:2,3). Este ‘el día del Señor’ que se oculta a los sabios del mundo, pero revelado a los vigilantes, es una época de muchas señales entre las naciones. Ha estado marcado como una época cuando se han hecho esfuerzos de traer paz y seguridad al mundo, pero inútilmente. También se compara con los dolores de parto que una mujer experimenta antes de alumbrar a su hijo, y representa los espasmos de los problemas que han venido sobre la tierra, especialmente desde la Primera Guerra Mundial. Pero, como el apóstol escribió, el mundo no puede escapar de este tiempo como una mujer no puede escapar de los dolores de parto.
Pablo continúa: “Más vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón. Porque todos vosotros sois hijos de luz y del día; no somos de la noche ni de las tinieblas” (vs. 4,5). Los seguidores verdaderos de nuestro Señor son ‘hijos de la luz’ y ‘del día’ mientras que otros quienes son menos cuidadosos en los asuntos espirituales están asociados con ‘la noche’ y ‘la oscuridad’. Los que caminan en la luz y son parte del día, están vigilantes. Ellos han sido alumbrados con la palabra de la Verdad, y no se contaminan con las falsas doctrinas de este mundo. El apóstol amonesta: “Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios. Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan” (vs. 6,7). Debemos mirar las señales, y vigilar nuestra conducta, en un mundo perverso.
“Pero nosotros que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y amor, y con la esperanza de salvación como yelmo” (vs. 8) Pablo nos da directrices para seguir, y los que tienen el espíritu de un sano juicio en los caminos de la Verdad y la Justicia responderán de una forma positiva.
Porque a causa de la intensa persecución algunos hermanos en Tesalónica habían muerto. Pablo asegura a los hermanos de Tesalónica que ellos serán resucitados. Aquellos fieles quienes están vivos en aquel tiempo no precederán a los que habían muerto, pero serán unidos con los demás para estar siempre con el Señor I Tesalonicenses 4:13-18.
Como el tiempo se presenta cada más cerca para el cumplimiento de todas nuestras esperanzas, continuemos estando listos para aquella relación bendita con nuestro Señor en el reino.