| ESTUDIOS INTERNACIONALES DE LA BIBLIA |
Paz y alegria
|
Versículo clave: “Que os ha nacido hoy en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor” Escritura seleccionada: |
LAS PRIMERAS NOTICIAS del nacimiento de Jesús fue manifestado a unos humildes pastores que cuidaban a sus rebaños por la noche en el campo. (Lucas 2:8) Un ángel del Señor apareció en medio de ellos causando sorpresa en sus corazones, pero él les dio palabras confortadoras de seguridad con las buenas nuevas de gran gozo para todo el mundo. —vss. 9,10
El versículo clave indica el motivo de regocijo por la venida del Mesías largamente esperado que había nacido en Belén. ‘Que os ha nacido hoy en la ciudad de David, un Salvador que es Cristo el Señor’
Que asombroso debe haber sido para los pastores aprender sobre los orígenes humildes de este gran Dador que sería encontrado en un pesebre. (vs. 12) De repente un coro angelical entonó la alabanza a Dios por su gran misericordia hacia la humanidad enviando a su Hijo al mundo para traer paz y buena voluntad para los hombres. —vss. 13,14
Una vez que el ángel partió, los pastores se dirigieron a Belén, encontraron a María, José y el niño Jesús en su pesebre. Los pastores revelaron lo que el ángel había declarado y contaron esta maravillosa noticia a todos. María consideró en su corazón, cómo y cuando Jesús llegaría a ser el Príncipe de Paz como fue dicho en la profecía. —vss. 15,19; Isaías 9:6
Después de que Jesús alcanzó la madurez fue bautizado y recibió el Espíritu Santo. Poco después de esto, mientras estaba en la sinagoga en Nazareth, Jesús leyó de las Escrituras, “El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados” (Isaías 61:1,2). Aplicando este pasaje a él. —Lucas 4:21
Las buenas noticias angelicales de paz y de alegría, donde se proclamaba el nacimiento de Jesús acontecieron hace tanto tiempo que podemos preguntarnos si esas promesas alguna vez se materializarán. La aparente demora en su cumplimiento puede ser explicado por el hecho que era necesario que Jesús muriese como un sacrificio para redimir del pecado y muerte a la entera raza humana. Jesús también necesitó ser levantado de la tumba por el poder Divino y gloriarse antes de establecer su reino de paz.
Desde que Dios deseó tener una iglesia asociada con Cristo en esta tarea gloriosa los creyentes que siguen el camino de santidad y sacrificio también compartirán en el trabajo de traer un gobierno virtuoso sobre la tierra. “Visitó primero a los gentiles, para tomar… un pueblo para su nombre. … Después de esto volveré, y reedificará el tabernáculo de David,… Para que el resto de los hombres busque al Señor.” —Hechos 15:14-17
Durante el reino del Mesías, la paz y el gozo llenarán la tierra, porque leemos, “El Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, Venga; y el que quiera; tome del agua de la Vida gratuitamente”—Apocalipsis 22:17
¡Que maravilloso tiempo de bendiciones será!