¿Qué significa Jesús para ti?

Versículo clave: “El ladrón no viene sino para hurtar, matar y destruir; Yo he venido para que tengan vida, y para que tengan en abundancia”
—Juan 10:10

Escritura seleccionada:
Lucas 2:8 - 12

JESÚS, MEDIANTE SU sacrificio por las ovejas, se convirtió en “la puerta” de la iglesia. Al dar su vida por las ovejas los redimidos de la muerte, y de la esclavitud de la ley; también demostró su amor por las ovejas, su genuino interés en su bienestar. Para las ovejas esto es muy importante, pues prueba que pueden tener confianza en tal pastor. Cualquiera que pretenda ser pastor y no está dispuesto a dar su vida por sus ovejas, no es persona en quien se pueda confiar.

La voz del buen pastor, hoy aún es la voz de la verdad, la verdad que está compuesta de los grandes fundamentos del Plan Divino de las edades. Esta voz habla de la sabiduría, de la justicia, del amor y del poder del Creador, y da seguridad sobre su designio para bendecir a todas las familias de la tierra a través de Cristo y su iglesia de la edad del evangelio. Es un mensaje glorioso, y sentimos seguridad en la iglesia que escucha, reconoce y sigue este mensaje según el camino estrecho hacia el reino celestial.

La voz del Buen Pastor, la voz de la verdad, es una influencia que unifica al pueblo del Señor. Interpretaciones extravagantes de porciones de la Palabra intrigan a unos pocos por un corto tiempo, pero a menudo llevan a un espíritu de separación, sintiendo que ellos han avanzado un poco mas allá que los otros. La voz del Buen Pastor nunca lleva a esta situación.

El Buen Pastor está más interesado en el bienestar de toda su iglesia que en sí mismo. Esta es la razón por la cual Jesús dio su vida por sus ovejas. Los pastores que no tienen ese mismo interés no son verdaderos representantes del Maestro. Uno que está interesado en asegurarse de que se le siga sin tener en cuenta las necesidades de su rebaño no es un verdadero pastor. Está sirviendo para su propia ganancia, y Jesús lo ha identificado como un mercenario.

Un pastor mercenario, nos explica Jesús, huirá cuando las ovejas estén en peligro de ser esparcidas y destruidas por lobos. Un verdadero pastor hará todo lo que pueda para proteger a sus ovejas, dará su vida haciendo esto tal como lo hizo Jesús, si fuese necesario dando su vida. Como pastor representando a Jesús, sus propios intereses serán secundarios a aquellos a quienes sirven.

En la parábola, Jesús enfatizó que la razón por la cual Él dio su vida por las ovejas, es porque sabía el Plan de Redención del Padre Celestial, y cómo se manifestaba allí el amor divino. Jesús y su Padre fueron uno al llevar a cabo el Plan de Salvación. El amor de Jesús por el mundo fue el mismo como el amor de su Padre; y con tal amor motivando todo lo que dijo e hizo, no podía ser sino un Buen Pastor que daría su vida por las ovejas. Mientras más sepamos de nuestro gran Padre Celestial y nuestro Señor Jesús, más firmemente confiaremos en ellos, y entusiastamente seguiremos la voz del Buen Pastor.

Además, Jesús explicó que el Padre lo amaba, porque amaba a las ovejas. A través de los siglos muchos han tratado de representarse a sí mismos como siervos de Jehová ante el pueblo, pero la mayoría sólo buscaba sus propios intereses y persiguieron a los verdaderos profetas a quien Dios envió. Estos fueron los ladrones y salteadores que sólo parecen ser pastores. ¡Qué contraste con la actitud de Jesús! ¡Claro que el Padre lo amaba! Su amor por cada uno de nosotros también está en proporción a nuestro amor por los hermanos.

El apóstol Juan escribió: “Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte” (1 Juan 3:14). Esto es una seguridad que si continuamos escuchando la voz de nuestro Señor, tendremos vida, y “más abundantemente”